¡Hay, el "funcionariado"...! Ante todo -totalmente lejos de mi intención- generalizar. Sí precisar.. ¿El qué? Pués aquélla casuística que "daña" a dicha corporación (y nó desde hoy)... La "daña" -y gravemente- considerando que es el dinero público el que -con procedimientos iguales a los que explicaré- sale más que perjudicado: "Sale" totalmente dilapidado, hablando en "román paladino"...
Hablo de "ése" funcionario (lo digo en singular, pero...) que marca a las 8 de la mañana. A las 9,30 deja el trabajo, para su desayuno (legalmente)... Pero es que sobre las 11 de la mañana se permite (sin la menor legalidad al respecto) salir de su trabajo, para hacer la compra y atender aquéllos asuntos personales que le son própios, pero para los que -en forma continuada- carece de permiso... Es igual, se lo toma y -salvo casos muy concretos- tampoco se le reprende. Y no se hace, en razón a que -su superior- también hace lo mismo...
Tales procedimientos "también" se producen en la empresa privada pero -muy raramente- son tolerados, si descubiertos... Y es que no es igual que el dinero "no tenga cara" a la hora de dilapidarlo. Que "SÍ" tenga rostro y además, con nombre y apellidos...
Y Añado -para salir al paso de comentarios fáciles-: En mi familia tengo a un funcionario y -además- con cargo y responsabilidad... lo cual -para nada- significa que -por tal motivo y además personal- deba contribuir a callar, lo que nó debe ignorarse. Sobre todo en los presentes momentos, en los que -el dinero de todos- debería merecer el máximo respeto. A pesar de que "no tenga cara, ni nombre, ni apellidos"...
Saludos.
Hablo de "ése" funcionario (lo digo en singular, pero...) que marca a las 8 de la mañana. A las 9,30 deja el trabajo, para su desayuno (legalmente)... Pero es que sobre las 11 de la mañana se permite (sin la menor legalidad al respecto) salir de su trabajo, para hacer la compra y atender aquéllos asuntos personales que le son própios, pero para los que -en forma continuada- carece de permiso... Es igual, se lo toma y -salvo casos muy concretos- tampoco se le reprende. Y no se hace, en razón a que -su superior- también hace lo mismo...
Tales procedimientos "también" se producen en la empresa privada pero -muy raramente- son tolerados, si descubiertos... Y es que no es igual que el dinero "no tenga cara" a la hora de dilapidarlo. Que "SÍ" tenga rostro y además, con nombre y apellidos...
Y Añado -para salir al paso de comentarios fáciles-: En mi familia tengo a un funcionario y -además- con cargo y responsabilidad... lo cual -para nada- significa que -por tal motivo y además personal- deba contribuir a callar, lo que nó debe ignorarse. Sobre todo en los presentes momentos, en los que -el dinero de todos- debería merecer el máximo respeto. A pesar de que "no tenga cara, ni nombre, ni apellidos"...
Saludos.