Creo -José- que confundes la "soberbia", con la exigencia......

¿La expresión de la "unica verdad", en un libro...?

Si hasta los conceptos científicamente demostrados, están sujetos a variación, discusión y demostraciones distintas según se patenticen nuevos conocimientos y -por tanto- nuevas aseveraciones. ¿Qué no deberá ser con un libro que afirme o niegue a la divinidad, sin otra posibilidad de demostración que la palabra escrita...?

Y quiérase entender lo que intento expresar: Ni la afirmación más absoluta, ni la negación más clara; están demostradas y -por tanto- distan una enormidad de reflejar -sin la menor duda- ¿el qué...? Pués la "absolutez"...

A veces, lo que más cerca tenemos es lo que menos vemos. Eso sucede también con lo "trascendental" que contiene la Biblia, incólume ante los ataques empecinados de escépticos e incrédulos.

Como bien dices -J. Garcia Alvarez- "a veces", nó siempre: Valóralo...

Insisto: La absolutez nó esta reflejada ni en la Biblia, ni en quienes niegan sistemáticamente, su verosimilitud... El camino de lo absoluto -de momento- quién más cerca está de "aproximarse" a encontrarlo, es el científico...

Saludos.

Vaya tela, Interesado. ¡El científico! Pero, hombre, si todos ellos juntos no reúnen ni un solo gramo de imaginación. ¡Qué va, qué va!

¿Quizás quieres expresar que para tener fé, hay que caminar sobrado de imaginación...? Bueno, bueno...

Con todo -permíteme- el científico, antes de demostrar- tiene, por obligación, que imaginar... Y así procede "SIEMPRE"...

Saludos.

No, para poder tener fe hay que estar desprovisto de soberbia, pecado que abunda entre los científicos de la Tierra. Al decir que no tienen imaginación suficiente para poder analizar la Biblia debidamente, era para señalar su incompetencia en éste y otros sectores. Luego, es conocido sobradamente, que los "sabios" de este mundo han logrado ciertos "avances", tras cometer montones de errores... Y, la Ciencia, así procede "SIEMPRE"...
Saludos.

Creo -José- que confundes la "soberbia", con la exigencia... y -al efecto- lo siguiente:
La exigencia (que el ser humano se hace a sí mismo, para intentar "saber") es un valor "INDISCUTIBLE" que adorna a la condición humana... por lo tanto: concediendo que el ser humano "ha sido dotado" de dicha posibilidad para utilizarla... ¿Qué razones son las que justifican nó deba utilizarse dicho valor (el de querer saber) para reflexionar sobre la existencia, real, de la Divinidad y -en consecuencia- sobre la realidad, o nó, de la Biblia...?

Verás: Los "sábios" y los científicos de verdad (los hay que gustan de parecerlo y no lo son...) son muy, pero que muy distintos, no debes confundirlos (bién, es una sugerencia...) el científico se forma, estudia, imagina y -a partir de realidades- investiga, prueba y -por último- afirma, desde la prueba demostrada. El sábio "sabe", o eso cree... y -por supuesto- no siempre parte desde el contraste y la demostración... Nó, no es lo mismo...

Con todo -creo no lo estás apreciando-... verás: -desde el agradable diálogo que estamos manteniendo- diálogo que como te dije "aquí" ha despertado pasiones, por supuesto que nó, las mías...; por mi parte "en ningún momento" he negado la posible existencia de la Divinidad ni -tampoco- la verosimilitud del libro sagrado (para algunos, para otros nó...) al que se ha llamado Biblia...

¿Cómo voy a negar nada, si -hoy por hoy- (y quizás siempre) tengo los mismos argumentos para afirmar que para negar...? Y es -precisamente- éso, lo que "a mí" me interesa dejar claro, por encima de "mi" fé (de la "aquí" nunca he hablado, ni hablaré...)

Y es que -verás, José- soy un acérrimo defensor (creo lo habrás notado) del rigor... Y el rigor que por cierto, es otro valor humano... y la fé "EN LO ESPIRITUAL", casan mal... de ahí que me esfuerce en separalos... siempre desde el respeto.

Un saludo.