EL LENGUAGE DE LAS FLORES
Si contemplando las flores
las pudiéramos entender,
al escuchar su lenguaje
nos podríamos sorprender.
Las hay que giran y giran
buscando el sol todo el día,
y otras que duermen de noche
cerrando su celosía.
Cuando sus pétalos cierran
a mí me parece ver,
que cierran sus aposentos
hasta el nuevo amanecer.
Al llegar el nuevo día,
suave, el sol las despierta,
y ellas sus pétalos abren
como el que se despereza.
Otras cerradas que suenan
igual que una campanilla,
y parecen cascabeles
cuando el aire las agita.
A mí es que me gustan todas
desde las más delicadas,
como dice la
canción
que se manchan al tocarlas.
O los mantos de la Virgen
que por el suelo se arrastran,
con florecillas pequeñas
blancas, azules, ó malvas.
Todas ellas son hermosas
solo hay que contemplarlas,
tratándolas con dulzura,
con placer acariciarlas.
Y aunque no las entendamos
yo sé, que las flores hablan.
Pa. Sa. Ma.