TU LUZ ME GUIA...

TU LUZ ME GUIA

Cuando triste la tarde sombría llega,
mi cuerpo y mi alma se desconsuelan.

Porque siento esa pena ya tan profunda,
que mis ojos las lágrimas me los inunda.

Yo le busco remedio, y no lo encuentro,
porque tengo nublado hasta el pensamiento.

Es tanta la pena que llevo dentro,
que en mi pecho no caben más sentimientos.

Ese ser que yo amaba se marchó un día,
y con él se marcharon mis alegrías.

Ya no estrecha sus manos en mi cintura,
ni mis labios los besa con su ternura.

Le gustaba mi cabello cuan largo era,
y enredaba sus manos en mi cabellera.

Al marcharse de mi vida, yo lo corté
y lo tengo guardado solo para él.

De aquella mirada dulce que acariciaba,
solo queda el recuerdo, de aquel que amaba.

El está en mi recuerdo siempre presente,
aunque no pueda verlo porque está ausente.

Mudos están sus labios, sus ojos ciegos,
pero a mí me ilumina su luz de fuego.
Pa. Sa. Ma.