ME LLUEVEN...

ME LLUEVEN
Me siguen lloviendo ironías mundanas
y de los serenos caminos rosas.
Me siguen de las calles del mundo
tristezas de siglos,
entre ellas
me resuenan las penas de trigo
escaso en hombres
condenados a olvidos.
Frente a tanta nube gris
aún quedan hombres cantando versos
desde sus zapatos rotos.:
los de lujosos zapatos siguen vacíos.

! Que amargo zumo de palabras
, me he bebido de el emiciclo,
que sabor a mentiras
a demolición a derribo!

! Haber cuando de una vez cantamos
primavera, ríos
de versos próximos al abrazo,
claros y sencillos.

Ha be cuando espantamos
pájaros negros, mejor destruir nidos
de maletines sembrar de cantos renovados
los mil sucios caminos.

Mejor será traer nuevas madrugadas,
pensar porque tanto buitre agazapado
y tanta voluntad en cadena da...
! Hay que despertar y despertado
dejar de ser esa larga caravana
de infelices hombres asustados!

Mejor será hoy que mañana.
¿Acaso, hombres blasfemando
(amos, dueños) no derrumban nuestra propia casa?
Casa tuya, casa mía
gravemente secuestrada
demolida o vejada.

Si me entiendes amigo
andaremos de la mano por estos versos
a compartir la soledad de estar conmigo...
Contaremos las muchas paletadas de polvo
que manchan los mil caminos.