NADIE CONOCE SU NOMBRE...

NADIE CONOCE SU NOMBRE

Camina con paso lento
entre penosas pisadas,
se nota su sufrimiento
en sus ropas marginadas.

Con barbas de varios días
y suciedad en sus manos,
tiembla en las mañanas frías
en ciertos momentos vanos.

Nadie conoce su nombre
ni sabe de su existencia,
solo se ve que es un hombre
que camina en la indigencia.

Sentado sobre algún banco
echo de dura madera,
solo buscando el estanco
en su vida pordiosera.

Sin sonrisa ni lamentos
parece vivir su vida,
sufriendo los fríos vientos
en esa senda perdida.

Como mendigo indigente
le va tratando la vida,
quizá no sabe la gente
si tiene su mente herida.

Pasando su triste vida
entre penosas andadas,
su fe se quedó vencida
en otras horas marcadas.

Sus sombras quedan hundidas,
dicen que están enterradas,
el mendigo ve perdidas
sus ilusiones pasadas.

El parque va contemplando
su mirada dislocada,
y la gente está mirando
su piel que se ve arrugada.
G X Cantalapiedra.