Buitre leonado, Literatura

Buitre leonado
sobrevolando la N-320,
fotografiado desde mi terraza.

¡"Fectivamente"!

Lo que pasa es que el aleteo de las perdices es como decir -según se decía en un spot femenino-: ¿A qué huelen las nubes? Y sobre las tres cosas que enumeras, tras de las cuales se puede uno ya morir y quedarse tan agusto, te diré que de la primera lo único que siento es añoranza porque me publiquen otro; por lo de hacer una barriga a una, ya sería la 8ª (octava) y sobre plantar un árbol..., ni me acuerdo cuantos he plantado en mi vida.

Escribí una novela sobre Madrid para participar -y participé- en un concurso promovido por el ayuntamiento y nada. Cuando fue el plazo fui a recoger mis tres ejemplares y, no siendo por los comentarios alentadores de dos señoras del departamento correspondiente y tres novelas de ediciones anteriores que me regalaron, salí de allí sin pena ni gloria, pero sí dolido precisamente por los comentarios de las dos administrativas, referente a la forma o modo de cómo se "escogía" al ganador. También me dijeron que lo siguiese intentando, que no perdiese la esperanza.

Al tiempo, dos años después, la Eperanza a la que le hice las siete barrigas también la perdí.

Seguiré escribiendo, porque entre otras cosas me gusta hacerlo y aunque no sea más que para que se lea por aquí, al igual que por otros foros donde participo y en mis blogs, de momento me siento satisfecho. Pero eso, de momento, que me lo estoy pensando.

Pero es tan difícil ganar un premio literario, habiendo tanto literato bueno por ahí, que...

Saludos