RECORDANDO AQUELLA MALDITA GUERRA INCIVIL
Hoy las personas mayores van recordando su guerra, y nos hablan de dolores con los pasajes que encierra. Nos hablan del racionamiento, sin luces de penitencia, con bombas de sufrimiento que no lo cura la ciencia. El hambre vino marcando muchos días de exigencia, las muertes fueron llegando entre gritos de inocencia. Maldita guerra de hermanos, que hoy se viene a la memoria, y dicen ciertos humanos, que se raciona la historia. Hacen cobijo de todo, nos llega la intransigencia, los precios logran su trono y nunca tienen clemencia. Hay personas preocupadas, porqué les falte alimento, y dejan puertas cerradas con este sufrido invento, Esperemos que la calma nos devuelva los alientos, para ver que nadie aclama aquellos negros momentos. Fueron tiempos con hambruna, entre los paisanos muertos, cualquiera bomba inoportuna lleva llanto y descontentos. El recuerdo sigue vivo, fueron muy malos momentos, hoy no existe aquel motivo que arrastraba sufrimientos. Han pasado muchos años, y no me sirve el desvelo, aunque se temen los daños de ver guerra sin consuelo. Habrá quien gane dinero y rompa mil presupuestos, algún viejo trafullero puede que siga el sendero. Esperemos que otra guerra que viene dejando muertos, no nos marque su ceguera ni deje pueblos desiertos. La esperanza sigue viva, la libertad es derecho, que el dictador no perviva haciendo todo mal hecho. Vivimos tiempo de dudas, soñamos estar despiertos, hay muchas penas agudas cuando nos hablan de muertos. La Paz nos deja progreso que suele causar la calma, no queremos pueblo preso que es lo que Ucrania reclama. Libertades que se pierden entre las dudas amargas, las conciencias no se venden ni quieren las noches largas. G X Cantalapiedra. 14 – 3 – 2022.
Hoy las personas mayores van recordando su guerra, y nos hablan de dolores con los pasajes que encierra. Nos hablan del racionamiento, sin luces de penitencia, con bombas de sufrimiento que no lo cura la ciencia. El hambre vino marcando muchos días de exigencia, las muertes fueron llegando entre gritos de inocencia. Maldita guerra de hermanos, que hoy se viene a la memoria, y dicen ciertos humanos, que se raciona la historia. Hacen cobijo de todo, nos llega la intransigencia, los precios logran su trono y nunca tienen clemencia. Hay personas preocupadas, porqué les falte alimento, y dejan puertas cerradas con este sufrido invento, Esperemos que la calma nos devuelva los alientos, para ver que nadie aclama aquellos negros momentos. Fueron tiempos con hambruna, entre los paisanos muertos, cualquiera bomba inoportuna lleva llanto y descontentos. El recuerdo sigue vivo, fueron muy malos momentos, hoy no existe aquel motivo que arrastraba sufrimientos. Han pasado muchos años, y no me sirve el desvelo, aunque se temen los daños de ver guerra sin consuelo. Habrá quien gane dinero y rompa mil presupuestos, algún viejo trafullero puede que siga el sendero. Esperemos que otra guerra que viene dejando muertos, no nos marque su ceguera ni deje pueblos desiertos. La esperanza sigue viva, la libertad es derecho, que el dictador no perviva haciendo todo mal hecho. Vivimos tiempo de dudas, soñamos estar despiertos, hay muchas penas agudas cuando nos hablan de muertos. La Paz nos deja progreso que suele causar la calma, no queremos pueblo preso que es lo que Ucrania reclama. Libertades que se pierden entre las dudas amargas, las conciencias no se venden ni quieren las noches largas. G X Cantalapiedra. 14 – 3 – 2022.