POEMA DE CHARLES CHAPLIN, Teatros varios (representaciones)

POEMA DE CHARLES CHAPLIN

"El teatro de la vida"

La vida es una obra de teatro que no permite ensayos...

Por eso, canta, ríe, baila, llora

y vive intensamente cada momento de tu vida...

... antes que el telón baje

y la obra termine sin aplausos.

¡Hey, hey, sonríe!

más no te escondas detrás

de esa sonrisa...

Muestra aquello que eres, sin miedo.

Existen personas que sueñan

con tu sonrisa, así como yo.

¡Vive! ¡Intenta!

La vida no pasa de una tentativa.

¡Ama!

Ama por encima de todo,

ama a todo y a todos.

No cierres los ojos a la suciedad del mundo,

no ignores el hambre!

Olvida la bomba,

pero antes haz algo para combatirla,

aunque no te sientas capaz.

¡Busca!

Busca lo que hay de bueno en todo y todos.

No hagas de los defectos una distancia,

y si, una aproximación.

¡Acepta!

La vida, las personas,

haz de ellas tu razón de vivir.

¡Entiende!

Entiende a las personas que piensan diferente a ti,

no las repruebes.

¡Eh! Mira...

Mira a tu espalda, cuantos amigos...

¿Ya hiciste a alguien feliz hoy?

¿O hiciste sufrir a alguien con tu egoísmo?

¡Eh! No corras...

¿Para que tanta prisa?

Corre apenas dentro tuyo.

¡Sueña!

Pero no perjudiques a nadie y

no transformes tu sueño en fuga.

¡Cree! ¡Espera!

Siempre habrá una salida,

siempre brillará una estrella.

¡Llora! ¡Lucha!

Haz aquello que te gusta,

siente lo que hay dentro de ti.

Oye...

Escucha lo que las otras personas

tienen que decir,

es importante.

Sube...

Haz de los obstáculos escalones

para aquello que quieres alcanzar.

Mas no te olvides de aquellos

que no consiguieron subir

en la escalera de la vida.

¡Descubre!

Descubre aquello que es bueno dentro tuyo.

Procura por encima de todo ser gente,

yo también voy a intentar.

¡Hey! Tú...

ahora ve en paz.

Yo preciso decirte que... TE ADORO,

simplemente porque existes.

Cuando me amé de verdad (Charles Chaplin):

Cuando me amé de verdad comprendí que en cualquier

circunstancia, yo estaba en el lugar correcto, en la hora

correcta y en el momento exacto y entonces, pude relajarme.

Hoy sé que eso tiene un nombre…”AUTOESTIMA”.

Cuando me amé de verdad, pude percibir que mi angustia y

mi sufrimiento emocional, no es sino una señal de que voy

contra mis propias verdades.

Hoy sé que eso es…”AUTENTICIDAD”.

Cuando me amé de verdad, dejé de desear que mi vida fuera

diferente y comencé a ver todo lo que acontece y que contribuye a

mi crecimiento.

Hoy eso se llama…”MADUREZ”.

Cuando me amé de verdad, comencé a percibir como es

ofensivo tratar de forzar alguna situación, o persona, solo

para realizar aquello que deseo, aún sabiendo que no es el

momento o la persona no está preparada, inclusive yo mismo.

Hoy sé que el nombre de eso es…”RESPETO”.

<p>Cuando me amé de verdad, comencé a librarme de todo lo que</p><p>no fuese saludable…, personas, situaciones, todo y cualquier cosa</p><p>que me empujara hacia abajo. De inicio mi razón llamó esa actitud</p>egoísmo.

Hoy se llama…”AMOR PROPIO”.

Cuando me amé de verdad, dejé de temer al tiempo libre y desistí

de hacer grandes planes, abandoné los mega-proyectos de futuro.

Hoy hago lo que encuentro correcto, lo que me gusta, cuando quiero

y a mi propio ritmo.

Hoy sé que eso es…”SIMPLICIDAD”.

Cuando me amé de verdad, desistí de querer tener siempre la razón y

con eso, erré menos veces.

Hoy descubrí que eso es la…”HUMILDAD”.

Cuando me amé de verdad, desistí de quedar reviviendo el pasado y

preocuparme por el futuro. Ahora, me mantengo en el presente, que es

donde la vida acontece. Hoy vivo un día a la vez.

Y eso se llama…”PLENITUD”.

Cuando me amé de verdad, percibí que mi mente puede atormentarme y

decepcionarme. Pero cuando yo la coloco al servicio de mi corazón, ella

tiene una gran y valiosa aliada.

Todo eso es…”SABER VIVIR!”.