Que gran alegría ha sido para el mundo entero ver que al menos una parte de España va llamándose a la civilización. Sería bueno que los que piensan en que está malo "prohibir" pensaran que prohibir es la única forma de legalizar la tortura, el maltrato, la aberración y que grupos de sádicos se reúnan a ver estas "fiestas" dignas de total repulsión. Justificar esto es como querer justificar la Santa Inquisición, como justificar a que una vez Franco pudiera estar por años y años en España y matar a tanta gente. Basta de ser cómplices de la muerte. Ahora a trabajar para que toda España deje a los toros en paz.