BURGOS, CAPITAL DE LA CULTURA 2016
Ya nos quedan dos años
para el dos mil dieciséis.
¿Seremos Capital de la Cultura?
Si nadie lo remedia,
la capital de la ruina.
Capital, sin mayúsculas,
capital sin dinero ni estima,
empeñados en devorar, castigar,
destruir, difamar el averno,
a un viaje sin mañana.
A este paso, con el Caballo de Troya,
vamos a ser Burgos, la capital del cuento,
de una gran multinacional, BNK, sin capital.
¿Quién nos lo iba a decir
que cambiaríamos la cultura,
el arte y la naturaleza
por el mundo destructivo y talibán?
No te puedo felicitar Burgos,
por tamaño cambio;
y sí, rendirte mi más sentido pésame.
Podríamos optar por recuperar la cordura:
acabar con las urracas, o con la gaviota en las urnas
que nos quiere llevar hacia otra dictadura.
Carmen García
Ya nos quedan dos años
para el dos mil dieciséis.
¿Seremos Capital de la Cultura?
Si nadie lo remedia,
la capital de la ruina.
Capital, sin mayúsculas,
capital sin dinero ni estima,
empeñados en devorar, castigar,
destruir, difamar el averno,
a un viaje sin mañana.
A este paso, con el Caballo de Troya,
vamos a ser Burgos, la capital del cuento,
de una gran multinacional, BNK, sin capital.
¿Quién nos lo iba a decir
que cambiaríamos la cultura,
el arte y la naturaleza
por el mundo destructivo y talibán?
No te puedo felicitar Burgos,
por tamaño cambio;
y sí, rendirte mi más sentido pésame.
Podríamos optar por recuperar la cordura:
acabar con las urracas, o con la gaviota en las urnas
que nos quiere llevar hacia otra dictadura.
Carmen García