No es necesario. Ya lo he hecho con mi abogado personal, para que presente la denuncia correspondiente en el Juzgado de Guardia.
¿Y por qué no existe Dios? ¿Por qué lo diga usted? Demuestre que no existe.
Espero que sí, que algunos TOMEN NOTA, pues de nada servirá su anonimato.
Así es, Triana, así es. Un hombre sabio en los proverbios como tú, no podía dejar de darse cuenta y hacérselo saber, a ese que ningún respeto tiene.
Todo será medido y pesado.
No creas que entro en cólera tan fácilmente. Aunque multiplicaras por miles tus cualidades inadecuadas, no lo conseguirías. Ni siquiera me enojo con tu persona que, de acuerdo con tu espíritu, debe ser bastante deforme, por aquello de que "la cara es el espejo del Alma". Son tus acciones, infeliz, tus acciones...

Es por tus acciones, propias de un ser sin sentimientos, la censura. Esa es la razón por la que siempre estás tan amargado y vengativo con la Divinidad, cuya Luz no puedes ver, y con el entorno social que te rodea y que no respetas.

Lo que no quiero seguir consintiendo y debes comprender por qué, es que te reiteres en ultrajar al Dios que tanto amo, aunque sé que, aunque quieras, no puedes conseguirlo, ya que Él no está al alcance de tus vilezas, propias de un ser muy cercano aún al proceso larvario. Pero, es triste, muy triste el contemplarte en esa oscuridad tan tenebrosa, preludio de la que te aguardará al final de tus días, en un horripilante lugar. ¡Oh, Dios mío, me parece estar oyendo tus lamentos y crujir de dientes, tu desesperación terrible en el tiempo inacabable, en ese lugar viscoso y frío!

Me das pena ¡pobrecillo! Debes ser muy infeliz, para estar siempre incubando tanto veneno, tanto odio y tanto rencor. Es lamentable que, siendo como eres hijo del Supremo Creador, no tengas en tu interior ni un solo rayo de luz suya.

Mi postura, no es de represalia personal, sino simplemente de justicia. Tus escritos y los de otros del Foro, que perseveran en tus mismos errores, están ya en manos de la Brigada de Investigación Tecnológica, de todos los arzobispados del país, de la policía nacional y del Rey. Como ciudadano responsable es lo que tenía que hacer, sin sospesar la indiferencia punible de aquellos otros que han estado leyendo y callando, sin mover un dedo.

Se ha agotado mi paciencia y ahora, si aún queda un poco de justicia humana, te enfrentarás a las consecuencias de infringir las leyes constitucionales, que condenan a los que injurian gravemente a la Casa Real y otras instituciones, entre seis meses y dos años de cárcel, según la legislación vigente. No creas que no van a dar contigo, aunque te escondas detrás de ese pseudónimo. Por tu IP te encontrarán y cabe en lo posible, que te den tu merecido.

Tal vez te escapes, tal vez no. Pero, si lo primero sucede y evades la justicia humana, jamás te escaparás de la justicia divina. ¡Pobre de tí! Los días venideros te irán dando prueba de ello y, aunque no quieras, te acordarás de mí. Ya lo creo que me recordarás y no te mofarás entonces, como haces ahora, sino que llorarás amargamente, al comprobar que te has alejado tanto de tu Dios.
Ahora, habrás de enfrentarte a tu destino. Ya sabes, los Punidores... ... (ver texto completo)
Hace unos cincuenta y tantos, más o menos, nacía el ser más abyecto de la historia española. Para alegría de Satanás, que comprobó la venida al mundo del que sería uno de sus más destacados esbirros, que llevaría a muchos los espumarajos de su rabia infernal.
Hace casi dos mil años, las Sagradas Escrituras pintaron un cuadro extraordinariamente preciso de la situación social de nuestra época. Predijeron:
"En los últimos días se presentarán tiempos críticos, difíciles de manejar. Porque los hombres serán amadores de sí mismos, amadores del dinero, desagradecidos, desleales, sin tener cariño natural, sin amor del bien, calumniadores, blasfemos, traicioneros, testarudos, soberbios, hinchados de orgullo, amadores de placeres más bien que amadores de Dios". ... (ver texto completo)
Los sabios saben que hay cosas que los necios no pueden comprender. En este lugar de debate, por ejemplo, hay un desalmado que ofende, calumnia e injuria a todo lo divino y humano, impunemente, sin que nadie haga nada por pararle los pies. Cuando en un Foro hay personas, con auténtico sentido de la justicia, honestas y responsables, en vez de inhibirse del tema, con una indiferencia inadecuada, se dirigen a la dirección del sitio o a las autoridades competentes, que las hay, y el individuo impresentable, que emite con frecuencia mensajes delictivos, es puesto en validación permanente y si el caso lo requiere, que suele requerirlo, EXPULSARLO. Eso, sí, los truhanes, al poco, con otro nick y diferente correo electrónico, vuelven a entrar para seguir con sus desmanes. Eso es lo que hay hoy y ya no se puede cambiar. Mientras exista la negligencia y pasotismo que a tantos embarga, los injustos prevalecerán sobre los justos. No se puede estar de acuerdo, pero los mezquinos, hasta el momento en que todo sea renovado, seguirán haciendo sus mezquindades. ... (ver texto completo)
Lo que ya se venia barruntando, no es el único, en Barcelona ya ha habido un par de casos y en facebook, que yo sepa uno.
No se trata del tema de injurias, no se trata de corregir a los que dan noticias falsas o falseadas, (de lo contrario tendrian que cerrar intereconomia), se trata de coartar la libertad de expresión.
Algo que a nuestro Presidente no le sienta biene, ya se sabe de que fuente franquista se nutrio.
Los diablos y las tinieblas del infierno no dan generalmente tanto miedo a la gente, pero muchos tienen gran temor de la luz divina. Y de hecho, es totalmente comprensible: sienten en el fondo de ellos mismos que tienen todavía la necesidad de dejarse llevar por los instintos, las pasiones, rehúyen esta luz que les enseñará que la vida que llevan es mediocre, incluso criminal… No quieren renunciar a ninguno de sus malos hábitos, y no soportan que esta luz pueda revelarles que estos hábitos son precisamente malos. Cuando no se quiere hacer ningún esfuerzo para mejorar, cerramos los ojos, nos tapamos las orejas y nos persuadimos de que estamos muy bien así.
Todos aquellos que temen la luz no saben muy bien el porqué, pero sienten instintivamente que hay algo en ella que amenaza lo que creen que es su felicidad. Solamente los que tienen sinceramente el deseo de evolucionar, de transformarse, buscan esta luz que les enseñará todo lo que hay que mejorar en ellos y cómo mejorarlo. ... (ver texto completo)