Vamos por partes. ¿Quien sufre cuando el aborto se...

Vamos por partes. ¿Quien sufre cuando el aborto se extiende como una pandemia, como lo está siendo ahora?
La primera persona que sufre es el niño que se ha abortado. Sufre porque en muchas ocasiones se ve descuartizado. Para COMPRENDERLO SERÍA NECESARIO QUE CUALQUIERA DE VOSOTROS, LOS QUE APOYAIS EL ABORTO OS DEJARAIS ESCUARTIZAR PARA ESPLICARLO MEJOR.

¿Cuando COMIENZA A SUFRIR EL NIÑO? ¿EL MES QUE LE TOCA NACER? ¿Un MES ANTES? ¿A CASO TRES MESES ANTES?
Dejémonos de ser una colla de ignorantes, porque ignorante no es solo el que sin saber una cosa se pone a dar explicaciones, sino aquel que se empecina en sus ideas sin aceptar otras razones.
Ninguno de vosotros ha sido abortado. ¿Hemos perdido algo por dejaros nacer?
Si no habéis sido abortados entonces estáis tratando un tema que desconocéis absolutamente.

El ser humano comienza a sufrir cuando empieza a vivir, aunque su vida sea rudimentaria.
El sufrimiento (y esto está probado científicamente) no lo percibe el cuerpo sin alma, sino el alma que está en el cuerpo. El cadáver no sufre.
Pero alguno de vosotros es tan ladino que apoya que no existe el alma. No solo eso, sino que llama "embustero" con bellas palabras al que defiende que sin el alma no se puede desarrollar ningún feto.

El alma, con todos sus sentidos, está en un cuerpo que se forma. Y sufre. Pero si este sufrimiento se trasmite a los órganos de los sentidos entonces es el alma quien los trasmite.
Digo para que entiendan todos. El que es abortado es un ser que sufre la muerte. Y la muerte es dolorosa, aquí y en las antípodas.

En segundo lugar sufre la madre. Si queréis comprobarlo observad a una mujer que haya abortado deliberadamente. Ella no quisiera sufrir los sentimientos del alma. Pero como es el alma quien trasmite el dolor al cuerpo, pues los siente.
A veces veo un manco que me dice: "Necesito algo para calmar este dolor que siento en el brazo que me ha sido amputado. Me duele terrible la mano del brazo amputado."
¿Y qué le diría cualquier ignorante? Le diría "Complejos, complejos y nada más que obsesiones".
Pues es cierto que una pierna amputada duele. Y no duele por donde se h amputado. Duele toda ella. Porque el alma no se encoge, ni se amputa.

En tercer lugar sufre la sociedad, porque en la actualidad están mermando todas las poblaciones. La población española, por ejemplo, que es donde más abortos hay, está desertizando los pueblos. Estamos necesitando personas de otros países, con costumbres diferentes, porque los pueblos quedan desiertos.

Mis amigos también yo tenemos casas abandonadas, fincas convertidas en eriales, pueblos fantasmas, porque nadie habita en ellos. No han nacido niños, los mayores murieron. No hay habitantes.

Habéis hablado alguna vez o habéis oído hablar del fin del mundo. Pues el mundo será mundo mientras Lo habite el hombre. Cuando tan solo las fieras lo habiten el mundo será una estepa salvaje, llena de alimañas, porque el hombre habrá desaparecido de la tierra. La tierra habrá perdido su idilio.

No se acabará el mundo por guerras. Se acabará por egoísmos. El egoísmo de los padres que no quieren hijos. Para que la población quedase igual se necesita por cada matrimonio al menos dos. Y aun así disminuiría la poblacion. Pero no tres ni dos ni uno.
Y si alguna queda embarazada, pues se desembaraza, y apoyada por vosotros que apoyáis cobardemente el aborto, con palabras embusteras y de malicia refinada, se queda sin nacer una hermosa chiquilla o un valiente caballero.
No temáis, que no va a suceder. El mundo es un vaivén. Sus ideas van y vuelven. Ya vendrán tiempos que os juzguen, a vosotras damas y caballeros. Y ojalá se declare el aborto CRIMEN CONTRA LA HUMANIDAD. Tal como se está pensando.
Vosotros habéis nacido. ¿Tanto os duele que nazcan otros semejantes? En el mundo cabemos todos. Y la belleza de la rosa de la juventud de una mujer, mañana será una flor deshojada, una palmera seca que no h dado fruto en su matrimonio porque no ha querido. Y algunos de los que esto leáis seréis el hacha que cortó la vida a esos inocentes.