Desconfiado como soy, de estos "señores" que apestan a dinero y con lo poco que se, de este asunto, me ronda la desconfianza.
A lo que parece este "señor" no ofrece sus dineros si no es con condiciones, para las que se precisan cambiar algunas leyes, a las que Doña Esperanza nos dice, que si hay que cambiarlas se cambian. Esto no queda nada guapo, puesto que las exigencias que se nombran, est´ña no apretar en fiscalidad, sindicatos fuera, y humos todos.
Hay oscuridad por el lado del dinero. Pagará este negociante, los terrenos, edificios y todo el montaje en su totalidad? me temo que no según leo que alguien tiene que prestar, en cuyo caso serían los bancos ¿Que bancos? ¿Los nuestros, si se dice que están vacíos, o al menos que yo sepa, no dan creditos así como así, aparte de que el gran escándalo está presente, pues parece que hemos olvidado que la situación a la que hemos llegado ha sido la consecuencia de exceso de ladrillo.
A todas luces este negocio no huele a claridad, y de ninguna manera se crearían tantos puestos de trabajo como se dice.
El tiempo lo dirá.
A lo que parece este "señor" no ofrece sus dineros si no es con condiciones, para las que se precisan cambiar algunas leyes, a las que Doña Esperanza nos dice, que si hay que cambiarlas se cambian. Esto no queda nada guapo, puesto que las exigencias que se nombran, est´ña no apretar en fiscalidad, sindicatos fuera, y humos todos.
Hay oscuridad por el lado del dinero. Pagará este negociante, los terrenos, edificios y todo el montaje en su totalidad? me temo que no según leo que alguien tiene que prestar, en cuyo caso serían los bancos ¿Que bancos? ¿Los nuestros, si se dice que están vacíos, o al menos que yo sepa, no dan creditos así como así, aparte de que el gran escándalo está presente, pues parece que hemos olvidado que la situación a la que hemos llegado ha sido la consecuencia de exceso de ladrillo.
A todas luces este negocio no huele a claridad, y de ninguna manera se crearían tantos puestos de trabajo como se dice.
El tiempo lo dirá.