El Periódido...

El Periódido
1
Comentarios
La noticia se quedaría coja si se dijera solo que la ciudad de Castellón ha alcanzado este fin de semana los 42,5 grados de temperatura, casi dos grados por encima de su récord histórico, 40,6, alcanzado en el año 2009. Lo realmente noticiable es que el nuevo récord se ha registrado de madrugada. Un fenómeno meteorológico ocasional en la costa mediterránea española, conocido en castellano como reventón cálido, en inglés como ‘downburst’ y en catalán como ‘esclafit’, traducible como estallido, ha castigado a los castellonenses con una madrugada insoportable. En realidad, ninguna de las tres palabras hace suficiente justicia a lo que comporta esta anomalía atmosférica. Es, más bien, como una suerte de tsunami de aire ardiente que se desploma desde las capas altas de la atmósfera hasta suelo a través de un gigantesco e invisible tubo del tamaño de un tornado y que, una vez en la superficie, se expande como una ola. Los 42,5 grados se alcanzaron en el observatorio del aeropuerto local a las dos de la madrugada.

Cambio climático