Buenas tardes: El jueves pasado dediqué mi tiempo de...

Buenas tardes: El jueves pasado dediqué mi tiempo de participación en la Radio local en el programa de poesía, a rendir mi más humilde homenaje a nuestro querido paisano, el buñolero, Luis Hernández Alfonso (1901-1979), presentando al personaje y leyendo varios de sus poemas. Me siento satisfecha del éxito obtenido y de la acogida por parte del público oyente, pues me solicitan volver a repetir el mismo. Sin lugar a dudas que lo haré, será para mi un honor y un verdadero placer.

A continuación escribiré una de las poesías que recité en ese día, y elegida al azar de entre su extenso poemario, aunque me es muy difícil hacerlo puesto que todas son preciosas.

Un saludo.

Yosefin

Redondillas inéditas de Luis Hernández Alfonse perteneciente a su albúm autógrafo titulado Navidad 1940, dedicado a su hija María Consuelo Hernández Rodríguez (1931-2003) y escrito desde la cárcel en Granada, en diciembre de ese mismo año.

EL FARO

No envidies a los que tienen
las riquezas y el poder,
porque suele suceder
que se van conforme vienen.
Las riquezas materiales
nos ayudan a vivir;
más no se puede pedir
a los bienes terrenales.
Hay quien el alma vendiera
para poderlos tener
y no sabe conocer
el valor de la quimera.
Aman mucho el dinero
más que el bien y la virtud
y vuven con la inquietud
de su minuto postrero;
porque cifrando su suerte
en reir y disfrutar
les turba su bienestar
el fantasma de la muerte.
Vivir dichos procura
sin hacer a nadie mal
tras la luz de un ideal
por caminos de ternura.
Sigue la senda florida
que marque tu corazón,
que es la propia estimación
el faro de nuestra vida.

Luis Hernández Alfonso
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
"No envidies a los que tienen..." He repasado mis pensamientos sobre esto y he lle sacado la conclusión de que todo se perderá mas pronto o mas temprano, quew algunos se consideran ricos con bien poco, que como lo suyo ha sido sudar, merecerían mas que otros, que no lo sudan, lo heredan, y hasta se hacen con ello a base de artimañas mil... estoy de pie en el mundo y lo veo.
Vengo de leer, este poema, montado en caballos veloces y triste por los vientos de la pena... hoy que hubiera preferido, contarme ... (ver texto completo)