libertad, este soneto te lo didico a ti....

! Hola amigos! Por mi ya larga caminata, por calles de canciones y lamentos, no quiero ser siempre transeunte en ellotodas las horas del día: recordar que un día prendí un clavel en su pelo, cuando regresaba de la ciudad, al lado del pan del arado, que cultive de niños y ya casi adolescente... se me despierta una musiquilla de los huertos, que la abrazo mientras me siento aquiel jovenzuelo, repatiendo corazones. Y es que:

VENGO DE...
Aquella que fue dueña de mi en el sembrado
una tarde que el cielo de rosa se teñía.
Fui suyo y aún recuerdo el verso y la armonía
de su cuerpo sobre el mío retozando.
! Ah su labios como locos estallando
calientes en los míos que perseguían
en mandatos de amor que extremecían
presos del instante, en ansias provocando...

Vengo hoy del ayer tyan... tan lejano:
tan... Tan de una tande adelantada,
tan... que aún me repican las campanas
en tan, tan de versos mil enamorados.

Vengo de aque aterdecer vajo los álamos
silenciosos, en el atardecer que atardecía:
del instante que gravitaban y se encendían
luces nuevas palpitando en mi costado.
Vengo de las horas de amor entre sembrados
tuyos mujer y te llamé algo mas que amiga
entre el color dorado de las mil espigas
testigos mudos de los cuerpos galopando.
Llamo mi locura a tu puerta, abrí el candado
y eme aquí recordando mi gran ventura
mi azorada torpeza... y la gran ternura
de sentirme a algo nuevo transportado.

Vengo de aquei potro joven a caballo
desbocado por tu cuerpo, y las llanuras
de un huerto de amor y su hermosura
mujer... en tantanes de amor recordando...

Que caballos de viento galopando
a grupas del amor se estremecían
aprendiendo a galope sinfonías
en galopes den viento enamorado.
libertad.

libertad, este soneto te lo didico a ti.

SONETO

Qué despliegue destila tu memoria,
qué fragancia de siembra en sinfonía
qué remanso de amor en la ternura
qué delicias te desatan alegrías.

Tus dedos teclean raudos e impacientes
volcados en recuerdo efervescente
transita, en tus venas la alegría
magia retenida, y trasparente.

Tus labios enjugan su piel morena
Palabras con sonido de dulzura
traba espiga tu fresca comisura.

Recuerdo que arrebaña sin despojo
laurel que en tu mente se mecía
como amante de la siega y rastrojo.

Saludos
Estrella
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Precioso soneto Estrella; precioso. Leyéndole se diría, que lo he leído, y entrando en él estallaron recuerdos de sembrados antiguos.
Y es que ayer tomaba yo nota de hechos que se sucedieron en mi adolescencia, sobre una chiquita
que en solo unos días llegó a quererme (como un hermano pensé yo) y yo mas que un poquito, en aquella época, en que se comienza a apreciar al sexo contrario, de forma limpia... aparte de esa timidéz que surguía en mí y que solo acertaba a tartamuedar, en presencia de una jovencita. Lo superé, a partir de aquel momento. Aún recuerdo aquel caserón y portal húmedo y frío, entareas que nos encomendaban los "amos" de los cuales pensé eran padres de aquella criatura... que venía de alguna parte del norte, y que me recordaba su drama.
Rosa,: se llamaba Rosa. pensando en ella y en mis 14 o 15 años escribí el poema... sobre lo que hubiese podido ser y no fué.
Puede que escriba la historia: reescriba, puesto que ya la escribí hace muchos años, tantos que apenas se puedo leerla, por lo borroso a consecuencia del tiempo trascurrido.
No trato en soneto, como podrás apreciar, si que aprecio su gran belleza. Este tiene mucho mas. Este es entrañable. Me he sentido dentro de él.
Un abrazo. ... (ver texto completo)