Que conste que no es por decir algo:! Cuantas cosas...

Que conste que no es por decir algo:! Cuantas cosas podría yo decir de Madrid! Su Retiro. Su casa de campo. Sus cines. Mi Atleti por los aledaños de Reina Victori Mi barrió de la ^Prosperidad luego, la calle Montera después... (! ojo, las nenetas, se las encontraba mas en la calle la ballesta y! ojo también, no las frecuentaba, puesto que las riberas del manzanares se prestaban para salir del paso y con y quitarse la fiebre parcialmente: los mayores me entendéis!) Y sobre todo mas atrás cuando, las cartillas de racionamiento: Los zapatos de Segarra: grandes porsi agrandaba el pié. por eso de que se crecía: menos que ahora, pero se crecía. Y se crecía, con carencias que ahora asustarían. Cine montija: Una peseta. Luego seis reales. Primera chaqueta (ya lo he dicho otras veces que hasta guardo los botones de aquella primera chaqueta comprada en el rastro, y hasta escribí la historia, de una madre... y una abuela hurgando en el fondo de su faltriquera.! Y como olvidad que viajar en l tranvía agarrado a la barra, en las mañanas heldas, la mano se quedaba pegada a la barra, y la otra al paquete, que casi siempre portaba un paquete, con la pequeña tortilla o muy poca cosa!
Otro día hablaré de mas tarde, que me siguió gustando Madrid Un día de estos me escapo, puesto que alguna de mi mucha familia la tengo localizada.
Puede que sigamos hablando de Madrid, Tal vez del Madrid pero por mi parte mas del sufrido Altlico, que yo conocería en "el metropolitano". A proposíto, diuás pasados, se hablaría de Escudero. del cual yo decía que era mi amigo. Cosas de chicos. Si que era muy amigo de una prima mía, que por cierto, tiene noventa y tantos, y sigue viviendo en Reina victoria, y que solo hace un mes he hablado con ella.
! Dios como pasa el tiempos madrid de mis años jóvenes!
saludos amigos.