HAY POLÍTICOS QUE ESTARÍAN MEJOR JUBILADOS...

HAY POLÍTICOS QUE ESTARÍAN MEJOR JUBILADOS
Corren vientos por España, de sufrir la peste negra, queriendo ver si te engaña este virus que es la fiera. Políticos mentirosos, que no miran al futuro, tan solo se ven dichosos si el tiempo se pone duro. Ponen palos en las ruedas para que perdamos marcha, de vez en cuando se quiebran y a cualquier fallo se enganchan. Hablan con frases pasadas entre sus negros presagios, y quieren mentes mundanas que solo comenten plagios. Van buscando ciertos votos para el mañana que viene, y se hacen llamar devotos de todo que les conviene. Trafulleros del destino, que sueñan cambiar razones, sin saber si son los virus los que anulan corazones. Gritan buscando palabras en sus tan raras lecciones, y quisieran ver las arras de muchas complicaciones. Nada nos van enseñando en sus malas soluciones, en ellos vamos notando sus crisis de conclusiones. Madrid se va despertando de estas malas vibraciones, que quieren tener callando a quien nos da sus lecciones. Peste que sigue corriendo por las calles más altivas, hay gentes que van riendo, si la peste les motiva. Madrid como semillero de esta peste maldecida, que va buscando sendero en cualquier zona querida. Hospitales al completo, virus que no se elimina, en algún enfermo inquieto el virus vuelve a su cima. Que no nos duerman con cuentos, que la peste sigue encima, temes el notar alientos de cualquier buena vecina. Políticos salva patrias, ellos todo lo eliminan, dicen que sus mentes lacias todo siempre determinan. Respetemos a doctores que saben de medicina, ellos curan los dolores sin pregonar su colina. Biólogos investigadores, señores de mente altiva, hablan de virus traidores sin ser la fecha festiva. Que no vengan los cuentistas con la bandera en su mano, nadie quiere oportunistas si sufre y muere el humano. Tengamos la mente abierta, Madrid se va contagiando, cuando la muerte te alerta no vale seguir callando. Médicos que están enfermos de estos virus mal llegados, sus efectos son tremendos dejando sueños truncados. Mascarillas de defensa, guantes en algunos casos, cuando la mente se tensa siempre teme los fracasos. La vida corre peligro si el virus va desbocado, a veces nos pega el giro dejando sueños truncados. La esperanza que no muera, si el corazón va gritando, cuando la peste lo quiera, nos dejará de ir dañando. G X Cantalapiedra. 8 – 5 – 2020.