No buscarón una alternativa porque sí. Buscaron una...

Carmena y sus ediles incumplen su promesa y reducen un 53% de media las donaciones de su sueldo.

Soto, Mayer y Zapata son los que más han disminuido las partidas altruistas de 2016 a 2017.

Tatiana G. Rivas.

Madrid.

Actualizado:

03/10/2018 02:44h.

Ahora Madrid llegó al Palacio de Cibeles poniendo en cuestión los elevados sueldos que cobraban los cargos electos. Querían «un cambio radical» en la administración, renunciar «a los privilegios», practicar «una política de austeridad personal», como recoge su reglamento económico. La propia Manuela Carmena aseguró tras ser investida que ella y todo su equipo se reducirían el salario a la mitad, como suscribieron en la mencionada carta financiera. Pero su pretensión se fue aparcando hasta que reconocieron que no era viable: o se lo bajaban los 57 concejales de todos los grupos que conforman el Ayuntamiento o no era posible recortárselo a los 20 de la marca blanca de Podemos.

Buscaron una alternativa con la que sacar pecho: la donación a organizaciones y proyectos solidarios. Según se puede comprobar en el apartado de transparencia de Ahora Madrid, la fiebre altruista ha ido perdiendo temperatura entre todos los abanderados de del cambio en Madrid de 2016 a 2017, donde de media se ha pegado un tijeretazo a su generosidad del 53%. A la derecha se muestra el ránking, de más a menos, de los concejales que han preferido guardarse más dinero en su caja de ahorros. Pablo Soto (Podemos), delegado de Participación Ciudadana ha pasado de donar 5.000 euros a nada en 2017 (un 100% menos); Celia Mayer (Madrid 129), que perdió la cartera de Cultura y Deportes para ostentar la de Igualdad en en 2017, de 33.400 euros a 6.606 (un 80% menos); Guillermo Zapata (Madrid 129), concejal presidente de Villaverde y Fuencarral-El Pardo, dedicó 28.000 euros en 2016 y prefirió dar 8.145 el año pasado, y Yolanda Rodríguez (IU), de Ciudad Lineal y Hortaleza, dio un salto de los 19.200 a los 6.100 euros.

No buscarón una alternativa porque sí. Buscaron una alternativa porque, como en todo y menos mal después de la corrupción que llevan nuestros políticos encima, hay que someterlo obligatoriamente a votación y los vuestros no quisieron. A vosotros ¿por qué os parece que fué, porque querían dificultar el cumplimiento de las promesas de Carmena o porque sus bolsillos debían vaciarse también?
Hay que vontar todo. Decir las verdades a medias como mínimo es mentir.
Saludos