¿De veras crees que eres libre? ¡Qué va, qué va! Estás...

¿De veras crees que eres libre? ¡Qué va, qué va! Estás encarcelado por tus prejuicios, aferrado por tus rencores, encadenado por un odio irracional hacia Dios, atormentado por tus ideas enloquecidas. Tu mente está onnubilada y no razonas correctamente. Sólo fabricas disparates y tu mayor afán es crear una audiencia que diga amén a todas tus tonterías descabelladas.

¡Y me estás llamando otra vez fanático a mí, so memo! ¿Es que nunca analizas lo que escribes y sólo te limitas a copiar y pegar, las sandeces de esos libros con los que te empapurras? ¡Qué bárbaro! En el libro Guinnes has conseguido el récord del mayor número de estupideces por minuto. Como te contabilicen las blasfemias y sacrilegios, las ofensas y las injurias a la Divinidad, terminarás en presidio. ¿Sabes que se avecina otra dictadura? ¿Sabes que la gente de Iglesia controlarán otra vez el Poder y lo usarán para instaurar "las buenas costumbres". En cuanto se enteren de lo que dices, que lo haces en público para el escándalo de muchos, serás, irremediablemente, condenado por hereje. Si te ríes, es que eres más cepa de lo que yo creía. Sé cauto, que te la juegas.

No pienses que todos los otros miembros de este Foro son impíos como tú. No caigas en el engaño de suponer que prefieren antes a tu Lucifer que a mi Dios. Ellos tienen Espíritu, Alma y corazón y los tres les claman por su Creador. No les tomes por borregos, pues tú, por mucho que depotriques de los clérigos, haces lo mismo que ellos, pero en el terreno de la difamación contra el Eterno, en la disertación blasfematoria, en tus demagogias de cretino. Ellos utilizan las imágenes, para reforzar sus ritos, y tú utilizas tus atolondrados gráficos para complementar tu política anticrística.

Ya lo creo que eres enemigo, como lo es tu señor Satanás. Eres ladino como tu amo Lucifer, Príncipe de las Tinieblas y tus creencias son la gangrena que carcome la salud del cuerpo espiritual de las criaturas, hechas a imagen y semejanza de Dios, aunque tú digas lo contrario.

Así que no deseas mal a nadie ¿eh? ¿Serás hipócrita? Si esparces el veneno de la palabra que mata, por doquier. Llevas la confusión, la mentira y el engaño a las mentes de personas honestas y sencillas que no están alienados como tú les llamas y que saben perfectamente que el Padre Creador les hace mucha falta cuando están en necesidad, cuando el dolor embarga sus atribuladas Almas y cuando la confusión creada por ateos como tú golpea a sus Espíritus.

Un cáncer maligno te corroe. Por eso, tus aberraciones llevan la propaganda explícita del Maligno, que ha hecho de tí un buen sicario. Te estás ganando el infierno, sí señor, a golpe de blasfemia y sacrilegio. Pero, no precaves, que tu vida va a ser corta y al final serás juez de tus propias equivocaciones. Tu desesperación será tal, al verte tan distante de Dios, que llorarás eternamente, porque tu ser tenderá de una forma natural e irreprimible a acercarse a la Suprema Esencia de la que procede, pero tu hacer infame sobre la Tierra no lo habrá hecho posible. ¡Ay, de tí! Sabido es, que todos los ateos mueren rabiando, sin excepción.

El árbitro del combate acaba de decretar tu K. O. técnico.