Conesa....

Conesa.

Eudoxia no te mosquees
porque al café no acudí
es que llegué y no te vi
y me tuve que volver

a comprar un pollo asado
para la cena de marras
que si vieras con las ganas
que la estoy esperando…

que seguro que estaremos
los dos solos en la casa?
que ya sabes lo que pasa
cuando nos ponemos tiernos.

Estoy loco de contento
porque me voy a llevar,
para cantar y bailar
un hermoso instrumento

y estoy dispuesto a decirte,
sentada en el sofá
cuando te vea “relajá”
aunque te parezca un chiste

lo que le dijo D. Juan
a Dª Inés de su alma
con salero y mucha calma
lo que parece un refrán.

“ ¿No es verdad, ángel de amor
que en esta apartada orilla?”
si me entra hasta cosquillas
y se me corre el sudor.