Yoli:
otro milagro de nuestros días. Mi pueblo infantil nevado via internet.
De haber tenido una cámara de fotos, esta, la hubiera podido sacar desde la puerta de casa. Una casa encantada por lo que solía encontrar muchas veces. Y decía, "Ah, un regalo del ratón Péréz. dinero que me encontraba en los agujeritos de las piedras, que no tenía su explicación pero que por aquel entonces creía a pies juntillos que alguien lo había puesto ahí para que yo lo encontrara. ¡Cómo son los niños!
Un beso que voy a hacer la cena.