Amigo ferisa: menos andar en globo, me pasó de todo...

Amigo ferisa: menos andar en globo, me pasó de todo en mi vida, que ya va seindo siendo demasiado larga. Pero ¡tener qaue defender la hispanizacion de America, fre nte a un español, es como demasiado. ¿Que nos pasa, de un lado y del otro del océano a los hispanos, que renegamos de nuestro pasado común y –ojala´de-nuestro futuro compartido’? Alla´se piensan europeos y aquí “originarios”. Cualquier cosa que no sea admitir que, en su inexorable marcha hacia la unidad humana mundial, primero hay una etapa de formación de grandes bloques que ya están recorriendo,, los paises de cultura árabe,, los anglosajones; y los pueblos eslavos. Somos europepos, sí, somos descendientes de las culturas pre-hispanicas, claro…, pero antes que nada somo hispanos, estamos creando la raza cósmica, fusión de todas las razas, que queria josé Vaconcelos, el gran mexicano. A comienzos del siglo pasado esto se percibía claramente, ahora la cosa tiende a empalidecer, la leyenda negra, actualizada y puesta al dia por nosotros mismoslo hace poible. Un poema, escrito en 1903 por el mestizo indo-hispano Ruben Dario -a quien algún imbécil calificaría hoy de “sudaca”-lo sintió y lo dijo. El poema esta recitado por, un descendiente de árabes, Jorge Cafrune, integrante de la raza cósmica que estamos formando aquí, en Hispanoamerica. Dice:
http://www. youtube. com/watch? v=ATP7JHqz5Gc
y luego de sta efusión poetica, vengamos a lo racional. Primero: los números de las poblaciones indígenas pre-hispanicas e suena un pocoexagerado, ¿Salio del estudio de Angel Rosemblat, o de Edurado Galeano Higgins, que oculta pudorosamente su segundo apellido britanico? Porque esto me hace recordar una anécdota don Jesus Nuñez, un excelente cónsul que tuvimos en Cordoba, Argentnina. En efecto, estando “celebrando” un 12 de octubre ofciialmenet, en presencia del gobenador de la provincia y otras altas autoridadess, hubo un desubicado qeu apovechó la circunstancia para hablar pestes de la hispanizacion. Nuestro consul, callaba y tomaba filosoficamente su café, cuando alguien que compartia su mesa, le pareció oportuno echar mas leña al fuego y le dijo: ¡Epa don Jesus, que están hablando mal de sus anepasados.!.. Don Jesus, terminó de sorber su cafecito (cafelito le llaman allí, no se por q ué) y dijo calmadamente: “.. de mis antepasados no, de los suyos, yo soy el l primero de mi familia que pisa América”Me parece que la hisorieta tiene miga, por eso me gusta recordarla cada vez que viene a cuento, o aunque no venga, como en este caso. Y aquí me despido hasta la proxima que seguiremos hablando del asunto, con argumentos menos pintorescos pero mas convincentess. BALDER
b.