Por lo que, leo, hoy hasta aquí, cambia muy poco, el panorama. puesto que repersentamos, al país en opiniones que yo llamaría de sensatas e insensatas... y justificando, lo injustificable. Los abucheos, toda clase de abucheos, en suna especie de aborregamiento, de euforia colectiva, de en compañía del otro desmadrado, resulta hasta cobarde.
Los insultos a Zapatero y otros pasable Pero por todos los diablos: ¿Que respeto hubo a los muertos? ¿saben estos individuo, o piensan un instante, como una madre llora, al hijo perdido, sea donde sea? ¿saben lo que se siente, perder un compañero con el que el día anterior, hablabas de la lejanía de su tierra y la tuya? Somos un país enfermo de mentes enfermas. Nada me extraña que piense a veces, quedarme en casa y cerrar los ojos, mientras me tapono los oídos. Ayer me decía alguien: "me contaba mi padre, como este país llegó a lor que unos llaman "Gloriosa Cruzada" los hechos se repiten.
! Como no sentir rabia!! Que tristeza de país!... decía mi abuela hace mucho tiempo: ¿En que ha cambiado? Yo lo diré: Nos deshumanizamos, cada día mas, y hasta nos importa un pito los males ajenos. Hasta los que reciben sin aportar nada se quejan. y como decía ayer un gran amigo: Ni nos toleramos, y si nos odiamos, de la misma manera que siempre. Y añadió: No tenemos remedio: añadió.
Muy mal pero que muy mal y muy penoso tener que presenciar, lo impresentable, Seguramente la prensa extranjera habrá tomado buena nota, de que tras el! olé! se ocultan bajezas humanas. Y seguramente los hay entre los que se desgañitaban que venía de sus rezos. Y puede que hasta de buenos colegios.
! Que país el mío! Y todo esto bandera en mano Y luego se extrañan que otros enarbolen otras banderas.
Y digo una vez mas, que un país se hace grande, sudando todo el mundo.
Los gritos ya nos habla la historia a que conducen.
Los insultos a Zapatero y otros pasable Pero por todos los diablos: ¿Que respeto hubo a los muertos? ¿saben estos individuo, o piensan un instante, como una madre llora, al hijo perdido, sea donde sea? ¿saben lo que se siente, perder un compañero con el que el día anterior, hablabas de la lejanía de su tierra y la tuya? Somos un país enfermo de mentes enfermas. Nada me extraña que piense a veces, quedarme en casa y cerrar los ojos, mientras me tapono los oídos. Ayer me decía alguien: "me contaba mi padre, como este país llegó a lor que unos llaman "Gloriosa Cruzada" los hechos se repiten.
! Como no sentir rabia!! Que tristeza de país!... decía mi abuela hace mucho tiempo: ¿En que ha cambiado? Yo lo diré: Nos deshumanizamos, cada día mas, y hasta nos importa un pito los males ajenos. Hasta los que reciben sin aportar nada se quejan. y como decía ayer un gran amigo: Ni nos toleramos, y si nos odiamos, de la misma manera que siempre. Y añadió: No tenemos remedio: añadió.
Muy mal pero que muy mal y muy penoso tener que presenciar, lo impresentable, Seguramente la prensa extranjera habrá tomado buena nota, de que tras el! olé! se ocultan bajezas humanas. Y seguramente los hay entre los que se desgañitaban que venía de sus rezos. Y puede que hasta de buenos colegios.
! Que país el mío! Y todo esto bandera en mano Y luego se extrañan que otros enarbolen otras banderas.
Y digo una vez mas, que un país se hace grande, sudando todo el mundo.
Los gritos ya nos habla la historia a que conducen.