Viajábamos hacia el sur, a las puertas del desierto por una ¿autopista? que llegaba hasta, Escritos "literarios" originales y propios de cada forero

Viajábamos hacia el sur, a las puertas del desierto por una ¿autopista? que llegaba hasta Egipto pasando por Libia. Empezamos a ver olivares y en varias direcciones, a lo lejos, se divisaba la cordillera del ATLAS.

A ratos se veía el Mediterráneo camino de SFAX. A lo lejos las grúas del puerto; y llega el momento de abandonar la "autopista" para adentrarnos en el interior del país camino de Matmata, el pueblo de las casas cueva. El paisaje era casi semilunar, desolador, pero me llamó la atención los pequeños poblados y sus antenas parabólicas sobre los tejados terrosos.

Comí en un restaurante cueva mi primer cuscús y en honor a la verdad os diré que no me gustó nada, nada... ¡Dónde esté un buen cocido!. Luego visitamos la típica casa con la señora moliendo el trigo con ese molino imposible y ancestral. Hicimos fotos, pero están en los archivos de mi contrario y no me las quiere mandar a los míos, ¡será posible...! a la vejez viruelas, mañana no cocino.

Aquí no vimos ningún niño y me resultó muy raro, por eso pregunté al guía y me dijo que en estas casas ya no vivía nadie, eran sólo un reclamo para el turismo, incluso la mujer era de atrezzo. Aquí el frío era mucho más intenso que en EL DJEM. Se me olvidaba, las puertas de las casas eran azules y arriba estaba dibujada ó grabada la mano de Fátima. Cada dedo representa uno de los grandes mandamientos del Corán.