¡AY QUE CALOR!, La Poesía

¡AY QUE CALOR!

Los dos extremos son malos
igual el frio que el calor,
todo el mundo nos quejamos
en invierno y en verano,
por temblores, o sudor.

Somos muy afortunados
por tener estos calores,
pues en España tenemos
un clima de los mejores

Por muy mal que yo lo pase
“que no lo paso tan mal”
porque me gusta el calor
y disfruto de verdad.

Pero pienso, pobrecillos
los que a intemperie trabajen
en ciudades o en el campo,
¡Esos si pueden quejarse!.

Pero quejarnos nosotros
por estar en la piscina,
O con aire acondicionado
fresquitos en la oficina...

Pienso en esas compañeras
metidas en la cocina,
con las calderas hirviendo
preparando la comida.

y esas maquinas tremendas
a más de sesenta grados,
para que vajilla y cubiertos
queden bien desinfectados.

Y en esos pobres paletas
subidos en los andamios,
que el sol le quema la espalda
y le reseca los labios.

O esos pobres jornaleros
entre los árboles frutales,
que no corre ni una brisa
para poder refrescarles.

¡Esos si tienen derecho
a quejarse y mucho más!
y sin embargo dan gracias
porque tienen un jornal.

Pero quejarse y dolerse,
eso es de seres humanos
pues nunca estamos contentos
ni en invierno, ni en verano.

Piensen un poco y verán
que siempre hay alguien peor
y sin embargo se aguantan
y le dan gracias a Dios.
Pa. Sa. Ma.