A la carrera por la presidencia de RTVE le ha surgido...

A la carrera por la presidencia de RTVE le ha surgido un 'tapado': Eduardo García Matilla. Consultor en temas de comunicación y con más de 40 años de experiencia en medios, dicen de él quienes le conocen que tiene "la televisión en la cabeza".

Sólo existe un problema: su candidatura difícilmente aguante los envites de la guerra que libran en silencio Globomedia y los 'telefónicos' de pedigrí político por hacerse con los altos mandos de RTVE.

García Matilla es un firme defensor de la televisión pública y cuenta a su favor haber pertenecido a la plantilla de RTVE entre 1971 y 1992, donde trabajó como ayudante de programación, redactor, guionista y programador en TVE y RNE.

"Si no existiera la televisión pública, habría que crearla, porque supone la única esperanza de que las audiencias con menos recursos", esbozó en un alarde populista en una conferencia en 2008.

Su candidatura cuenta con el beneplácito del sector más marianista de la comunicación de Moncloa, empezando por la secretaría de Estado de Comunicación, Carmen Martínez Castro.

El ministro José Ignacio Wert, quien también sonó como presidenciable de RTVE en su día, y el gurú electoral del PP, Pedro Arriola, en la picota por el fracaso electoral en Andalucía, avalan su nombramiento, al igual que su amigo el periodista Manuel Campo Vidal, presidente de la Academia de Televisión.

El problema de los ‘arriolistas' es que han perdido influencia en Rajoy tras el batacazo andaluz y por esa razón ‘su' candidato no las cuenta todas consigo.