Lorena González Guerrero
Nociones básicas de matemáticas: 540.000€ dividido entre 30 años de hipoteca = 18.000€ al año. 18.000 dividido entre 12 meses = 1.500€ al mes. 1.500 dividido entre dos personas = 750€ al mes cada uno… Les sumamos los intereses y 800 y pico € al mes que pagarán CON SU DINERO y no con el nuestro. ¿Cuál es el problema? ¿Quién de nosotros, teniendo dos niños en camino y una vida en la que no puedes salir a tomarte un café, darte un beso con tu pareja, pasear a tus perros o hacer lo que te de la gana sin que te vigilen, teniendo la posibilidad de pagar 800€ al mes no los destinaríamos a proteger la intimidad de nuestros niños, la nuestra propia y a vivir lo mejor que nos permita NUESTRO SALARIO? ¿El problema cual es entonces? ¿Qué tiene piscina, que tiene una buena parcela? ¿Qué nos hemos acostumbrado a que eso es “cosa de ricos” y ya hemos asumido que eso es algo que en este país sólo se consigue robando y que dos personas honradas es imposible que tengan acceso a esos lujos reservados? Pues qué triste.
El problema es que vivimos en un país donde pagar 800€ al mes por una casa no es austeridad o sobriedad porque nos han acostumbrado a la miseria más absoluta. Ahora, es de lo más normal pagar bolsos, coches oficiales, viviendas y trajes de diseño a nuestros representantes más distinguidos… Defender que dos personas que viven con una hipoteca de 800€ al mes no puede partirse el lomo luchando por un estado de bienestar que alcance a la mayoría social como lo están haciendo Irene y Pablo es reconocer que estamos instaurados en la precariedad más absoluta. Que la mayoría no podemos ni soñar con una hipoteca de 800€ a 30 años. Es indecente... Es un argumento tan chusco como que un médico o un profesor no pueden defender la educación y la sanidad pública porque, con su salario, podrían pagarse la privada al cobrar más que la media. Sigamos comprando el mensaje de que todos somos iguales, de que es lo mismo emplear el dinero que honesta y legalmente ganas con tu trabajo para vivir como te puedas permitir que crear un estado donde la corrupción, la prevaricación, la malversación, la especulación, la extorsión y el clientelismo de una banda organizada son el medio de vida de quienes día sí, día también saquean este país para vivir a nuestra costa
Nociones básicas de matemáticas: 540.000€ dividido entre 30 años de hipoteca = 18.000€ al año. 18.000 dividido entre 12 meses = 1.500€ al mes. 1.500 dividido entre dos personas = 750€ al mes cada uno… Les sumamos los intereses y 800 y pico € al mes que pagarán CON SU DINERO y no con el nuestro. ¿Cuál es el problema? ¿Quién de nosotros, teniendo dos niños en camino y una vida en la que no puedes salir a tomarte un café, darte un beso con tu pareja, pasear a tus perros o hacer lo que te de la gana sin que te vigilen, teniendo la posibilidad de pagar 800€ al mes no los destinaríamos a proteger la intimidad de nuestros niños, la nuestra propia y a vivir lo mejor que nos permita NUESTRO SALARIO? ¿El problema cual es entonces? ¿Qué tiene piscina, que tiene una buena parcela? ¿Qué nos hemos acostumbrado a que eso es “cosa de ricos” y ya hemos asumido que eso es algo que en este país sólo se consigue robando y que dos personas honradas es imposible que tengan acceso a esos lujos reservados? Pues qué triste.
El problema es que vivimos en un país donde pagar 800€ al mes por una casa no es austeridad o sobriedad porque nos han acostumbrado a la miseria más absoluta. Ahora, es de lo más normal pagar bolsos, coches oficiales, viviendas y trajes de diseño a nuestros representantes más distinguidos… Defender que dos personas que viven con una hipoteca de 800€ al mes no puede partirse el lomo luchando por un estado de bienestar que alcance a la mayoría social como lo están haciendo Irene y Pablo es reconocer que estamos instaurados en la precariedad más absoluta. Que la mayoría no podemos ni soñar con una hipoteca de 800€ a 30 años. Es indecente... Es un argumento tan chusco como que un médico o un profesor no pueden defender la educación y la sanidad pública porque, con su salario, podrían pagarse la privada al cobrar más que la media. Sigamos comprando el mensaje de que todos somos iguales, de que es lo mismo emplear el dinero que honesta y legalmente ganas con tu trabajo para vivir como te puedas permitir que crear un estado donde la corrupción, la prevaricación, la malversación, la especulación, la extorsión y el clientelismo de una banda organizada son el medio de vida de quienes día sí, día también saquean este país para vivir a nuestra costa