Un decreto de Zapatero obliga a rendir honores
militares a los restos de Franco en la exhumación. Así que
Pedro Sánchez va a tener que saludar a Franco a su paso, y va a ser el mayor "hazmereir" por tonto y no dejar las cosas como están. Además va a conseguir traerlo al centro de
Madrid (a la catedral de la Almudena), para tenerlo así más cerca.