Amiga mía: No cuestiono el contenido de tu carta, pues en ella señalas, los privilegios de los "mandamases" los que con medios a su alcance lograron huir, espaldas cubiertas: Si señalar, que si que me hubiera gustado escuchas la saña de los vencedores, en los últimos días, en la criminal hacaña de acabar con las izquierdas. Aquí, lo que digo siempre; unos y otros, estaban en guerra, y en estas se cometen desmadres. Por lo que yo repito lo que decía mi padre, el cual tuvo mas suerte que tu abuelo. Este decía: en un sitio quemaban iglesias, y del otro lado bendecían cañones. Pero siempre señaló como culpables los que la comenzaron. los generales impacientes y otros, los cuales no sufrieron para nada
lo que muchos inocentes, a los cuales persiguieron con saña. Si decirte que Negrín no le caía bien. Nunca supe porque: supongo por ese silencio obligado.
El interés porque la guerra continuara, fue en el convencimiento de que estallaría la Segunda Guerra Mundial, por parte de los dirigentes de izquierzas, en la esperanza de que lo que sucedió, despertara de su inmovilidad a los dejaron abandonada a la rpublica ya desde los días primeros. franco, el dictador, solo perseguía, acaban con todo el rojerío, como así a ves le llamaban con sorna. Algo que sucedió con aquellos que no tuvieron la suerte o desgracia, de atravesar la frontera... que para muchos, sería un largo suplicio
en la Francia ocupada.
En cuanto a la Iglesia: jamás a esta le gustó la República y por diferentes motimos. Cierto que algunos miembros de ella (solo unos pocos) condenaron todos los horrores. Como cierto también que Franco asesinó, según historiadores a curas vascos.
Vuelvo a lo mismo: las culpas, a mi entender, solo son de aquellos impacientes, que, a fin de cuentas, alguien también financió: alguien que tampoco amaba a la Republica...
Habría que señalar también aquella España de privilegiados y de pobres por todas partes.
Y no olvidar, que estos movimientos que hoy se dan tardíos, en los países árabes, son comparables a la situación de grandes masas hambrientas de entoces, y muchos años, de no entenderse.
Y es que una vez mas digo, que los pueblos se cansan de ser oprimidos.
Saludos.
lo que muchos inocentes, a los cuales persiguieron con saña. Si decirte que Negrín no le caía bien. Nunca supe porque: supongo por ese silencio obligado.
El interés porque la guerra continuara, fue en el convencimiento de que estallaría la Segunda Guerra Mundial, por parte de los dirigentes de izquierzas, en la esperanza de que lo que sucedió, despertara de su inmovilidad a los dejaron abandonada a la rpublica ya desde los días primeros. franco, el dictador, solo perseguía, acaban con todo el rojerío, como así a ves le llamaban con sorna. Algo que sucedió con aquellos que no tuvieron la suerte o desgracia, de atravesar la frontera... que para muchos, sería un largo suplicio
en la Francia ocupada.
En cuanto a la Iglesia: jamás a esta le gustó la República y por diferentes motimos. Cierto que algunos miembros de ella (solo unos pocos) condenaron todos los horrores. Como cierto también que Franco asesinó, según historiadores a curas vascos.
Vuelvo a lo mismo: las culpas, a mi entender, solo son de aquellos impacientes, que, a fin de cuentas, alguien también financió: alguien que tampoco amaba a la Republica...
Habría que señalar también aquella España de privilegiados y de pobres por todas partes.
Y no olvidar, que estos movimientos que hoy se dan tardíos, en los países árabes, son comparables a la situación de grandes masas hambrientas de entoces, y muchos años, de no entenderse.
Y es que una vez mas digo, que los pueblos se cansan de ser oprimidos.
Saludos.