! Hola María! Exactamente igual me cuenta mi mujer,...

hace más de 30 años que trabajo en un Hospital, y hay escenas de la vida que se repiten constantemente, cosas que pasan con los enfermos, etc., pues bien, hay casos (y os aseguro que más de uno) en que algún paciente que llega tras un accidente de moto, por ejemplo, totalmente K. O., si consigue salir adelante, te cuenta la siguiente historia:.... he visto como un túnel muy largo, y yo iba como volando, y al final del tunes he visto una gran luz que me llamaba, y allí todo era paz y tranquilidad, creo que he muerto y he visto a Dios, y he vuelto a la Tierra.... Bueno, más omenos así. Yo, que soy totalmente pragmática, tengo un argumento para todo ésto: Tras un accidente, cuando llegas al hospital estás más para allá que para acá, todos son prisas, los celadores te transportan en una camilla corriendo a todo correr por el largo pasillo de quirófano, donde no ves a nadie y pareces que vas volando, se llega al prequirófano, y de pronto está todo lleno de luz, ahí ya no te llevan corriendo, sino que el anestesista te tranquiliza si puede e inmediatamente te anestesia. Se acabó, tu no te enteras de nada y vives en la absoluta placidez, hasta que das en sí en la U C I (si consiguen salvarte, claro), y al darte cuenta de que no te has muerto, tu privilegiada mente traduce todo lo ocurrido por un acto suprahumano.
Igual alguien tiene otra conclusión.
Buenas noches.

! Hola María! Exactamente igual me cuenta mi mujer, respecto, a visiones que a mi modo de ver, se deben al estado del enfermo... y como yo mismo hube caído en esa experiencia, a causa de un accidente, en el que estuve en coma mucho tiempo, me remito a mis "visiones": túneles u otras experiencias, que entiendo es una lucha dentro del organismo, que se resiste, a pasar a lo que algunos, llaman otra vida.
Yo estaba en coma y sin embargo, capte, visiones reales e irreales. Me explico: Una maquina me taladraba sin cesar, donde me habían practicado la traqueotomía. Yo me encontraba tirado en la calle, donde alguien manejaba, uno de esos martillos, ruidosos, que perforan el suelo. El martillo, perforaba mi garganta, y una serie de luces, voces y sirenas lo invadían todo, y hasta un cura, rezaba por mí. Cuando recuperé el conocimiento; me diera cuenta de que el la calle aquella, se abrían zanjas, con la maquina ruidosa... "que me perforaba": no era otra cosa que el tuvo por donde por medio de una maqina respiraba. Las luces, las ambulancias. El cura, también existió: pasaba por el lugar. me lo confirmaron meses después, en una auto escuela que presenciaron mi accidente, y donde, yos sacaría precisamente meses después el carnet de conducir. Alguien lo nombró en su día tunel: "lo hay" (entre comillas) en esa lucha entre la vida y la muerte.
Otra encdota: escucharía a un comisario de policía, preguntar a alguien, en el fondo de la habitación donde me encontraba, si lo había alguien arrojado por la ventana o se había tirado el: Respondió, que no se acordaba, por haber bebido demasiado. Cuando yo desperté de mi coma pregunté al enfermero por este hecho, y me dijo, qu en efecto, que, habían tomado declaración a alguien que ingresó herido por una caída.
Otra visión, confusa pero que luego sería real: un grupo de médicos discutían, sobre mi estado. Voces y batas blancas, a lo lejos en algún lugar extraño, que el lo real no existe. opinaban unos sobre mi estado, y la necesidad de retirarlo que percutía en mi garganta, mientras una voz de mujer que llevaba la voz cantante, aseguraba, que dado a mi constitución física, la aguantaría.
Abrí los ojos: al menos ocho batas blancas aparecieron delante de mi, de espaldas una doctora bajita, que seguía dando su opinió respecto a mi. Uno de los de enfrente lle haría un sino con la cabeza y sonriente, se dirigió a mi,
preguntando, si entendía francés (esto me sucedió en Paris) asentí con un movimiento de cabeza afirmativo, y me explico la necesidad de mantenerme atado a la maquina.
Diera resultado, y que daría en mi grabado, todo lo sucedido, antes y después. Aun conservo un cuaderno en el que anoté, túneles que se sucedieron,, y hechos, en los día que permanecí en coma.
Añadir que se me llamó el resurcitado y las muchas atenciones para con mi persona. hay otra anecdota que sin tener mucha importancia, también guarda relación con los hechos. Escucharía una voces fuera de la habitación, en un lugar que deformaba las voces, y cuando estas cesaron viera inclinado sobre mi un doctor, que sudoroso me sonreía, mientras con una sonda me libraba de la mucosidad, que inpedía la entrada de aire a mis pulmones. Escucharía que le decía al otro. "Voy a olvidar este asunto, pero si le recomiendo que se busque otra profesión. Ya no le viera nunca mas; si a otro enfermero, quien me confirmaría había sido relevado.
Mi mujer que ha trabajado toda su vida en hospitales, me cuenta casos, m y yo le cuento, mis visiones... de las que opino, que son consecuencia del estado del enfermo, en una especie de lucha interna, en que los reflejos normales quedan dañados.
No creo que en sombras eternas, después de la vida. Si se que no sentí miedo alguno a esa gran sombra, y que cuando salí del coma total, tenía grandes ganas de vivir. Saramago, decía algo asi, como que: "Si no existiera la muerte, no nos hubiéramos inventado a dios y "la otra vida"
Saludos.