Buena medida querido
amigo, a veces hay que saber evadirse de la triste realidad y de tantas promesas incumplidas que solo buscaban el acceso al poder. Lo triste es que hubo mucha gente que creyó en esas promesas y así andamos, con el culo al aire y despidiéndonos de nuestros jóvenes que tienen que irse a otros países a buscarse la vida porque en el nuestro es imposible encontrar
trabajo. Una pena y una vergüenza nacional que
familias enteras tengan que depender de la pensión de los
abuelos mientras nuestra la clase
política se ve inmersa en la más deleznable
corrupción.
Un abrazo amigo