El próximo día 25 se verá en las urnas. Y, por supuesto, es sabido que los almerienses no queremos a los sociatas.
Yo, le aconsejo que esperen los resultados, y que escuchén a la gente. Que se acerquen no a los aduladores y fervorosos seguidores. Sino a la gente sensata, respetuosa. Que ve las cosas desde otra -OPTICA-. Que no pertenecén a ningún partido, ell@s son los que quitán y dan Votos, que son el Voto -libre e inteligente- elos tienen la respuesta.
mis saludos
mis saludos
Yo hablaba en general. Nunca he pertenecido a ningún partido, pues detesto lo que representan. Hace tiempo que no doy mi voto a nadie, ni de izquierdas, ni derechas, ni arriba o abajo. Me limito a ser espectador y no participante. Da igual que ganen unos u otros: Son todos iguales de sinvergüenzas, chorizos y corruptos. Si tuviéramos dignidad, ninguno apareceríamos por las urnas. Es mi opinión. Ahora espero paciente que alguno se me tire a la yugular. Es corriente en estos Foros.
Yo tampoco he pertenecido nunca ni perteneceré a ningún partido político ni sindicato, ni nada por el estilo.
He dado mi voto a varias siglas en distintas elecciones. Hubo un tiempo en que mi votos eran en blanco. Pero, últimamente, no creo que debamos dejar pasar la oportunidad de castigar a unos y dar una oportunidad a otros.
Te digo lo mismo que escribí en el comentario de inicio de este tema, en todos sitios cuecen habas, pero ¡macho! lo de Andalucía no tiene nombre ni comparación con cualquier otro caso de corrupción de los que se han conocido hasta ahora, sean del signo político que sean.
No estoy de acuerdo contigo en afirmar tan rotundamente que todos son iguales. Convendrás conmigo que unos son más que otros y que en unos partidos están más generalizados que en otros. Sería injusto meter en el mismo saco a todos, aunque hubiese solamente uno honrado.
Aparte, está la aptitud o ineptitud de unos y otros. Aquí sí que se ha notado la diferencia.
De ser completamente ineptos para servir al pueblo, eran muy aptos para servirse ellos, ¡y de qué manera y con qué cara!
En fin! que yo votaré por el cambio, a ver si se da. ¡Quién me iba a decir a mí cuando voté por primera vez que todas aquellas dudas que me asaltaban, hoy se han convertido en realidad!
No os será difícil averiguar cuándo fue, ¿cierto?
He dado mi voto a varias siglas en distintas elecciones. Hubo un tiempo en que mi votos eran en blanco. Pero, últimamente, no creo que debamos dejar pasar la oportunidad de castigar a unos y dar una oportunidad a otros.
Te digo lo mismo que escribí en el comentario de inicio de este tema, en todos sitios cuecen habas, pero ¡macho! lo de Andalucía no tiene nombre ni comparación con cualquier otro caso de corrupción de los que se han conocido hasta ahora, sean del signo político que sean.
No estoy de acuerdo contigo en afirmar tan rotundamente que todos son iguales. Convendrás conmigo que unos son más que otros y que en unos partidos están más generalizados que en otros. Sería injusto meter en el mismo saco a todos, aunque hubiese solamente uno honrado.
Aparte, está la aptitud o ineptitud de unos y otros. Aquí sí que se ha notado la diferencia.
De ser completamente ineptos para servir al pueblo, eran muy aptos para servirse ellos, ¡y de qué manera y con qué cara!
En fin! que yo votaré por el cambio, a ver si se da. ¡Quién me iba a decir a mí cuando voté por primera vez que todas aquellas dudas que me asaltaban, hoy se han convertido en realidad!
No os será difícil averiguar cuándo fue, ¿cierto?
Cierto, Pedro Luis.
Permíteme que te diga que comparto totalmente todo cuanto dices.
No seré yo el que quite o añada ni un punto ni una coma.
Lo que tú tienes claro, también lo es para mí.
Al decir que todos son iguales, hablaba en general.
Lo cierto es que los políticos que son honrados, los menos, muy pocos, no trepan como los demás, porque los corruptos se lo impiden.
Permíteme que te diga que comparto totalmente todo cuanto dices.
No seré yo el que quite o añada ni un punto ni una coma.
Lo que tú tienes claro, también lo es para mí.
Al decir que todos son iguales, hablaba en general.
Lo cierto es que los políticos que son honrados, los menos, muy pocos, no trepan como los demás, porque los corruptos se lo impiden.