Buenos días Lú: , Blog de notas y últimas palabras

Buenos días Lú:
Creo que estamos en el buen camino. Hay cultura del árbol. ¿Ves ese pino detrás de la rama de manzano florecido. Lo sembró mi hijo con unos piñones que le dieron en el colegio. Tras muchos avatares le llevamos a esta finca.
Si ves los paisajes a su alrededor creerías que algo raro hubiera ocurrido. No, simplemente los árboles se pudieron proteger mediante un vallado. Con discusiones, si; pero defendiendo la propiedad. Nos instaban a que abandonásemos el proyecto, que había un camino por el que siempre se pasó pero no constaba en las escrituras.
¿Queréis camino? Pues lo tendréis y mayor, y mas adecuado por el que pasarán tractores, máquinas e incluso un hombre a pie. Por camino que no sea.
¡Cuántos árboles arruinados hasta que por fin pudo crecer un nogal! Y una vez que en la tierra hubo un nogal con tanto sacrificio pensamos lo bonito que sería un campo de árboles frutales que en su día se sembraron y no fueron respetados.
¡Qué mejor lugar para un pinito que primero estuvo en una maceta, luego en un botijo roto y por fin pudo extender sus raíces a placer!
Ahora este huerto de frutales ha sido un ejemplo para mucha gente que finalmente ha optado por el vallado. Pero el nuestro tiene una belleza incomparable y fue el primero. No da riqueza económica ni monetaria pues no se venden sus frutos. No se rentabiliza la fruta con sulfatos químicos, hay frutas que tienen gusano pero otras no. Se rigen por la ley natural. Si hiela... siempre se da el caso de alguna fruta mas tardía que llega a puerto.
Y se ha poblado de pájaros de muchas clases, incluso hay cuevas de conejos. Un día una lechuza pequeña quedó atrapada y pudimos liberarla.
Y en un huerto así no podía faltar un lilo de flores moradas. Eso sí es un huerto que en primavera es ideal pero en verano... impracticable, algunas veces cuando las hierbas silvestres se espigan. Crece salvajemente. Menos mal que la crisis le ha salvado pues si no a estas alturas ya estaría construído. No hubiera podido evitarlo, y me hubiese dolido que se hubiera terminado algo tan bello como es mi huerto con muchas historias y poemas que crecen por las ramas. Algo único que puede terminar en cuanto la avaricia llama a la puerta. Mejor que se quede afuera.