Muchas gracias Tino por haber sido una persona tan cercana, por haberme tratado como tu igual, (un abismo entre tu y yo, y lo sabía) siendo una atrevida, aficionada pero entusiasta mujer en tal lid como me vi un día.

"Si puedo", me dije, con lo cerca que está el Mendoza, con la de veces que he ido allí con mis dos hijos.

Al mayor le dejaba en sus clases de inglés, y con el pequeño me dedicaba a ser de nuevo y por fin niña de nuevo jugando en la placita a tantos juegos aprendidos en mi infancia y en una placita tan parecida... Con sus farolas y sus jardines.

Si, "a por ti, a por ta y a por todos los demás".

Y a darnos cuerda y movernos como muñecos hasta que la cuerda se nos había acabado pareciendo entonces estatuas de hielo. "Y niño mío", le decía, este es el camino que un día tuve que emprender, y hoy he llegado hasta aquí, como por arte de magia, que has de saber que los caminos encierran mucha magia pero hay que tener una varita mágica que te conduzca hasta donde tengas curiosidad de llegar.

- ¿Mamá, ¿hemos llegado?

-Quizas, nunca se sabe, pero de lo que estoy segura es que estamos en el camino correcto.

¿Por qué no iba a poder un ama de casa como yo, tan ilusionada con los libros, con la educación, con la vida, hacer algo así. Y aquel día cumplí mi sueño de entrevistadora y hoy, el de contadora de cuentos.

¿Os ha gustado?
No hace falta que contestéis. A mi me gustó y me sigue gustando.

FOTO: PLAZA DEL IES CARDENAL "LOPEZ DE MENDOZA"