También fue un día inolvidable para mí que me reportó pensar todavía un poco más en la faceta del maestro - que tiene que enseñar y decir lo que le parece que hay necesidad de decir para que se tomen lecciones futuras.
Me influyó enormemente pues tuve la ocasión de hablar con él por teléfono y por carta también. Siempre me dio buenos consejos y él también se sentía muy satisfecho de todos los planes de futuro que se proyectaban para Tardajos. Le dediqué varios poemas; me dio su familia un conjunto de documentos del día de su nombramiento, de quien le felicitó, quien no pudo asistir al acto y de otros poemas que le dedicaron. Incluso la homilía de la misa de un Padre Paúl. El día que falleció, en Tardajos estábamos celebrando el Corpus que me dio motivo para dedicarle un poema final y una foto de unos niños que lanzaban pétalos de rosa en una despedida final.
Me influyó enormemente pues tuve la ocasión de hablar con él por teléfono y por carta también. Siempre me dio buenos consejos y él también se sentía muy satisfecho de todos los planes de futuro que se proyectaban para Tardajos. Le dediqué varios poemas; me dio su familia un conjunto de documentos del día de su nombramiento, de quien le felicitó, quien no pudo asistir al acto y de otros poemas que le dedicaron. Incluso la homilía de la misa de un Padre Paúl. El día que falleció, en Tardajos estábamos celebrando el Corpus que me dio motivo para dedicarle un poema final y una foto de unos niños que lanzaban pétalos de rosa en una despedida final.