Pues sí Enrique, siempre que llovió escampó, y viceversa. Y porque tengo mucho, mucho que hacer que si no, llegaba esta semana a los 5000 post. Me reparto entre muchas redes sociales y llego donde me da tiempo. Luego, escribir un poema es muy lento, hasta que das con las palabras y el significado.
Lo de la fiesta, es que no me quedan ni dos horas para meternos en faena. Lo primero, pelar las patatas, picar los ingredientes, y entre patata y patata pensar cómo se decora mañana. No te puedes repetir, aunque sí es cierto que algunas veces sacas una idea de decoración y no triunfa, luego, lo hace otro grupo y se lleva el primer premio.
Este año hay que contar que cada vez hay menos participantes, al menos en nuestros grupos, y todo tiene su lado bueno y su lado malo. Les dije, no os preocupéis, más huevos a repartir. Lo mismo con las patatas, que el aceite ya te lo dan más medido.
A la noche, a hacer las tortillas, y mañana, el guiso de las cazuelas, la decoración del puesto, llevar los platos a concurso, y si puedo ir al campo de fútbol en bicicleta, para llegar pronto, hacer fotos, y volverme a repartir los pinchos y los guisos. Participaré en los grupos Cantarranas y las Luertas, como siempre. No he fallado ni un año, bueno, sí, el año que no se hizo la fiesta. Los demás, siempre fija. De una manera o de otra animando la fiesta. Escribiendo cartas y poemas sobre la fiesta, previas de noticias, donde el diario ganaba más porque cobraba al ayuntamiento por el faldón, así se llaman los anuncios de los ayuntamientos, o de los industriales, comerciales, etc... Hasta algún día hice el artículo de la fiesta, y sin faltar a mis obligaciones como miembro del grupo. Alguna vez, mientras terminaban de comer, yo escribiendo, pasando fotos, etc...
Cada tiempo es distinto y hay que adaptarse. Renovarse o morir.
Así amanecía esta mañana desde mi terraza.
Saludos cordiales
Lo de la fiesta, es que no me quedan ni dos horas para meternos en faena. Lo primero, pelar las patatas, picar los ingredientes, y entre patata y patata pensar cómo se decora mañana. No te puedes repetir, aunque sí es cierto que algunas veces sacas una idea de decoración y no triunfa, luego, lo hace otro grupo y se lleva el primer premio.
Este año hay que contar que cada vez hay menos participantes, al menos en nuestros grupos, y todo tiene su lado bueno y su lado malo. Les dije, no os preocupéis, más huevos a repartir. Lo mismo con las patatas, que el aceite ya te lo dan más medido.
A la noche, a hacer las tortillas, y mañana, el guiso de las cazuelas, la decoración del puesto, llevar los platos a concurso, y si puedo ir al campo de fútbol en bicicleta, para llegar pronto, hacer fotos, y volverme a repartir los pinchos y los guisos. Participaré en los grupos Cantarranas y las Luertas, como siempre. No he fallado ni un año, bueno, sí, el año que no se hizo la fiesta. Los demás, siempre fija. De una manera o de otra animando la fiesta. Escribiendo cartas y poemas sobre la fiesta, previas de noticias, donde el diario ganaba más porque cobraba al ayuntamiento por el faldón, así se llaman los anuncios de los ayuntamientos, o de los industriales, comerciales, etc... Hasta algún día hice el artículo de la fiesta, y sin faltar a mis obligaciones como miembro del grupo. Alguna vez, mientras terminaban de comer, yo escribiendo, pasando fotos, etc...
Cada tiempo es distinto y hay que adaptarse. Renovarse o morir.
Así amanecía esta mañana desde mi terraza.
Saludos cordiales