oro44. Vamos a ver, buen hombre. Voy a voleo. Tomaré...

NO si gallardía tienen mucha, y astucia más. siempre en perpetuo lloriqueo. Siempre guardando su presa y siempre añorando la que el vecino alcanza. Ya no hay agricultores de subsistencia. A pesar de manejar mucho dinero, siguen siendo tan miserables como por no tener lo eran mis abuelos.
Que se puede pensar de unos paisanos que por ochocientos euros que vale una res declaran al lobo enemigo público.
Los pueblos se quedan vacíos, no se van a quedar si ni ellos mismos se soportan. Cuatro vecinos y cinco enfadados. Y eso si muy gallardos. pocos hay. pero a menos se les ve. Miran al forastero que hasta ayer fue del pueblo. entre puertas. No lo miran lo espian.
Han arado lindes y caminos y. Han talado todos los árboles. No hay cangrejos ni peces. Los ríos contaminados. y a lo único que da importancia esta estirpe de rudos caminantes es al beneficio que pueda sacar individualmente, a consta del lobo o de lo que sea.

oro44. Vamos a ver, buen hombre. Voy a voleo. Tomaré palabras de su escrito.

1.- Dice que no hay cangrejos en Castilla, en León tampoco. El cangrejo desapareció de nuestros ríos, lagos, lagunas, presas, regueros y allá donde corriera el agua. Desapareció hace unos 42 años. Es posible que quede alguno del país, nuestro. No al "hijo puta del cangrejo americano" que destroza todo lo que pilla a su paso. Ese, "eso" no es nuestro.

2.- Peces. En Castilla no lo sé, pero en León, donde tenemos los mejores ríos de España, con truchas muy buenas, doy fe de que hay "buena familia" de salmónidos. Peces en general han desaparecido, no por productos pesticidas, más bien porque los ríos que proceden de los embalses, el agua sale muy fría y solo la trucha aguanta el frío de las aguas. Barbos, bogas y escallos han desaparecido. Quedando solo la trucha.

3.- La gente se va de los pueblos. No es así, la gente hace tiempo que ha ido abandonado su pueblo. Quedan cuatro octogenarios que cobrando una pensión se administran bien, aunque podía ser algo mayor la pensión. Verá usted, con una pensión de 700/800 euros, les da para comer sin tener que sembrar la finca. Con unos kilos de garbanzos y legumbres, con cuatro gallinas, y con tres conejos, viven. No es de extrañar que no labren las tierras, además, por su edad. Nunca se volverán a repoblar los pueblos. Nunca. Los pueblos... han muerto.