La reforma, no es más que una serie de reuniones inútiles y estériles, cosa que saben de sobra los representantes de los trabajadores, pero que no pueden hacer otra cosa mas que acudir a las reuniones, pues si se lebantan serán el centro de la diana para el gobierno y la patronal.
Ya dige cuando asumio el Gobierno Rajoy que hay tres grandes reformas que tiene que acometer de forma inmediata.
Una ya la hemos vivido, con las medidas restrictivas que aprobó tan pronto como se hizo cargo de la Gefatura del Estado.
La siguiente es la reforma laboral, pues a estas alturas nadie en su sano juicio ve que la patronal esté en disposición de alcanzar acuerdos con los sindicatos, pues a la patronal no le interesa perder los privilegios de los que hace obstentación en el presente (despidos casi gratis, contratos mas que precarios, contratos ilegales que trabajo tal y como están las cosas no revisa, subvenciones por ERES, Subvenciones por trabajos precarios etc, etc, etc), por lo que la patronal pretende que sea el Ejecutivo quien ratifique la reforma por decreto, pues el PP siempre va a premiar al empresario en detrimento del trabajador. La otra gran reforma se verá con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2012, y que se harán esperar hasta el último día de marzo. ¿Que nos queda a los trabajadores?, aguantar el chaparrón, por que ni los sindicatos son representantes cualificados para luchar por los derechos de sus representados.
Mientras el PP sigue sumergido en ponernos cada vez las cosas peores, unas reformas que la ciudadania ve con buenos ojos, haciendolas la derecha, pero que jamás se le perdonarian el PSOE. Yo por lo menos no
Ya dige cuando asumio el Gobierno Rajoy que hay tres grandes reformas que tiene que acometer de forma inmediata.
Una ya la hemos vivido, con las medidas restrictivas que aprobó tan pronto como se hizo cargo de la Gefatura del Estado.
La siguiente es la reforma laboral, pues a estas alturas nadie en su sano juicio ve que la patronal esté en disposición de alcanzar acuerdos con los sindicatos, pues a la patronal no le interesa perder los privilegios de los que hace obstentación en el presente (despidos casi gratis, contratos mas que precarios, contratos ilegales que trabajo tal y como están las cosas no revisa, subvenciones por ERES, Subvenciones por trabajos precarios etc, etc, etc), por lo que la patronal pretende que sea el Ejecutivo quien ratifique la reforma por decreto, pues el PP siempre va a premiar al empresario en detrimento del trabajador. La otra gran reforma se verá con la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2012, y que se harán esperar hasta el último día de marzo. ¿Que nos queda a los trabajadores?, aguantar el chaparrón, por que ni los sindicatos son representantes cualificados para luchar por los derechos de sus representados.
Mientras el PP sigue sumergido en ponernos cada vez las cosas peores, unas reformas que la ciudadania ve con buenos ojos, haciendolas la derecha, pero que jamás se le perdonarian el PSOE. Yo por lo menos no