estimado amigo fernando: en cada intervención tuya...

estimado amigo fernando: en cada intervención tuya me ratifica más en mi posición, pero me hace comprender mejor la tuya, lo que, en finitiva, sirve para enriquecerme como hombre. Tal vez este sea el sentido ultimo del famoso "dialogo democratico", más allá sus obvias connotaciones electoralistas. Defendés con galanura posiciones que rechazo visceralmente. A veces, me parece estar otra vez escuchando a mi tio Basilio en el patio de nuestra casa del barrio Flores. de resultas de cuyas conversacines aprendi algo que me ha orientado toda mi vida, a saber: que no importan tanto las ideas que se tienen sino los motivos o las rzones que se alegan para
tenerlas. Todos tenemos la expeiencia de vera nuesto lado en la misma trinchera a gente que, en el fondo, uno desearia ver enfrente. La reciproca es cierta: a veces se desearia tener como compañero al adversario. ¿No te pasa lo mismo?
Coincidimos-me parece-en muchas cosas y nos distancian otras tantas. ES hora de discutir sobre unas y otras. En el fondo nuestra dispar apreciaccion sobre la revoluion francesa, radica en que observamos el fenomeno desde dos puntos de vista distintos.. EL tuyo, me parece entender es exlusviamnte economico y social, es decir, politico; el mio es conceptual y filosofico, o sea metapolitico. Tal vez por ello arribamoa a concluiones diferentes, aunque ambos coincidamos en la necesidad de reemplazar el modelo (diria vos) o el paradigma (digo yo) del agónico capitalismo, antes de que haga más daño a la sociedad (dirias vos), o al ser humano (digo yo) (Aclaracion: entiendo por metapòlitica, a la influencia de lo cultural sobre lo politico. Cultural en su sentio más amplio que incluye tambien tambien lo económico, pero en su justa medida. Nada más. Porue si bien es cierto que el saber económico constituye un saber cientifico, hay que discriminar el hecho de que se trata de un saber muy acotado. No estamos ante una ciencia qúe brinde certezas como las de la Fisica o la Matematica, cuyos fenómenos se reiteran y por lo tanto puden ser previsibles. Si arrojamos una piedra al aire, podemos estar seguros de que cumplirá obedientemente la ley de gravedad y caerá a ierra, a razon de 9,8l mts x seg. En cambio, ni los mas agudos economistas pueden darnos la más aproximada de la certezas de cuando se producirá tal o cual fenomeno economico. Los "maxistas de manual"tienen una explicacion"cientifica" de cualquier suceso historico del pasado, del presente y hasta del futuro. No tomar en cuenta los imponderables de la cultura hace que ese marxismo sea tan discutible. el popio Kral Marx, con toda su afinada percepcion de la ralidad que le oco vivir pisa el palito (= se engaña), cuando sostiene al industrializado imperio británico frnte a la "atrasada"India alegando que su polongacion en el tiempo, traerá finalmente el desarrollo de sus fuezas productivas, lase que fatalmente engendrarán su propio proletariado, el que, con igual fatalidad conducirá finalmnte al mundo haacia la sociedad universal sin clases. o sea: que bajo el capitalismo liberal o el materialismo marxistas, tarde o temprano nos encontraremos viviendo en un mundo unico, homogéneo, gris. Aparte de que sea verdad que el mundo se encamina hacia tan indeseable unicato en el cual se borrarian las especifidades (que no deben confundirse con la desigualdades sociales o economicas) que hacen al ser humano unico e insustituible. Tal es la posicion que disculpa a los "revolucionarios" de 1789, segun una vision excesivament eonomicista, parecida a la opinion marxista sobre la India en el silo XIX y que acabamos de comentar. Mi interpretacion del fenómeno es muy otra. Comienza en el siglo XVI, con un teologo, fundador de una secta cristiana a quien daria su nombr. El teologo es el francés Jean Calvin; la secta, el calvinismo. ¿y que sostiene Calvin? Una pajaronez (=tonteria) ni mejor ni peor qu otras que se sostenian entonces en la Europa Reformada, pero llamada a tener una gran repercusion. (Un boludz (=majadería) dicha en su tiempo suele tener mas aceptacion que una Gran Verdad proclamada a destiempo). El señor Calvin sotenia, aparenmnte en serio, que in sostnia ue, no importaban tanto las obras, porque estabamos predestinaos al cielo o al infierno desde el principio de los tiempos. Con ser bastante esto no era todo, Dios mostraba su aceptacion de los elegidos, otorgándoles a sus trabajos el exito economico. George W. Bush no lo hubiera dicho mejor. Así, la avaricia -madre de toda actividad lucrativa (o por lo menos, madrastra)- dejó de ser uno des lo siete pecados capitales y se constituyó en el princiipal motor de lda la actvidad económica. (¿Y San Francisco de Asis y su hermana la pobreza? Bien,, gracias). Entonces el espiritu cpitalista va en busca de otra presa: el préstamo a interés: practicada vergonzosamente y a escondidas, condenada doblemente por la doctrina oficial y por la sancion social, la usura espearba impacieent su turno para salir del armario. La ocasion se la dió, pintada, uno delos cambios producidos en Francia unos pocos años despues: el reemplazo del anticuado sistema por otro nuevo: el Contrato reemplazando al Estatuto, oficializado en la ley Le Chapelier (junio de 1791) que prohibe las asociaciones gremiales y remueve las disposiciones que impiden la competencia. Las "fuerzas poductivas" así liberadas: el préstamo a interés y la competencia descontrolada, sientan las bases del capitalismo moderno. El viejo dicho:"el dinero no engendra dinero"es remplazado; ahora, sí se sabe que puede hacerlo. Y lo hace. La revolución-cuentas hechas - se reduce a esto, a unas declaraciones retóricas... a y a la masacre de una clase para ser reemplazda por otra, no sin antes y de paso, ahogar en sangre la resistencia del pueblo bretón y hacer desaparecer del mapa -literalmente-a la ciudad de Lyon. Cuando la desastrosa administracion "revolucionaria", ponga al borde de la quiebra al Estado se echará mano de los bienes de la Iglesia, alegando que son un bien publico, cosa enteramente falsa ya que provienen en su inmensa mayoria de las donaciones de particulares. Puestas a la venta, ¿quienes seran los unicos que tengan el poderio economico para comprarlas?. Adivinaron. La burguesia ensancha su base de poder. Cuando surjan nuevas dificultades fincieras, rcurrirá a las guerras de agresion para recomponerla. Son las guerras napoleónicas, primer antecedente moderno de la guerras imperialistas de nuestro tiempo. ¿O no se habian apiolado (=enterado) todavia los amigos foreros obnubilados por las declaraciones retóricas de los burgueses del siglo XVIII? Alguien debiera decirles que los Reyes son los padres. Y hablando de reyes, ¿cómo termina la aventura de 1789? Pues creando nuevas monarquias y nuevos privilegios, pero esta vez de la mano de un tanito petiso y ambicioso: Napoleone Buonaparte. La revolucion francesa habrá culminado dejando todo como estaba. O peor. ¿Y a ´"esto" quiere que lo considere un antecedente valido de mi indignación?. NO, gracias. Hasta la próxima. BALDER