Y Abel Hernández está convencido de que Sánchez está...

Y Abel Hernández está convencido de que Sánchez está como un cencerro. "Pedro Sánchez sigue perdido en su laberinto o, usando una imagen más acorde con su metáfora preferida, hundido en el fango. Encuentra ayuda y comprensión en los medios de comunicación amigos, y busca refugio en Cataluña, pero se ve que no está repuesto del todo. Sigue obsesionado con la suerte judicial de su mujer y la repercusión pública del caso, para él y para ella. Califica persistentemente de bulo cualquier noticia que ponga en duda la acrisolada honorabilidad de Begoña Gómez, su amada esposa. Se manifiesta hipersensible como si le rozaran una herida abierta". Y esa hiperactividad es sospechosa. Que lo hubiera pensado antes.