"Tras los casos de Victoria Di Salvo, María Cecilia...

"Tras los casos de Victoria Di Salvo, María Cecilia Tonón, Nadiya Quiroga y Gilda Di Fonzo, opinan ciudadanos que viven en la Madre Patria. En los últimos 3 años y medio fueron expulsados 3.700 argentinos. En nuestro país, la inmigración española llegó a casi 1.400.000 personas desde el siglo XVI hasta mediados de los 70. "Lo que se hizo con la señora Di Salvo es anticívico. La Seguridad Nacional Española sobrepasa los límites de autoridad. ¿Por qué una ciudadana argentina de 58 años que tiene a sus descendientes en Canarias se la retiene 48 horas en una sala de inadmitidos, se le roba el dinero ahorrado para ver a su hija y su nieto y se le pone una estampilla en el c... y se la manda de vuelta? ¿Hemos tratado nosotros así a los miles de españoles que llegaron a la Argentina? ¡No! --agrega este hombre de 62 años que desde hace 27 vive en Logroño.... El caso de Victoria no es el único: la profesora María Cecilia Tonón relató que el 10 de este mes fue incomunicada y demorada cuatro horas y "despachada" en el avión "y ni siquiera me dieron el pasaporte, sino que se lo dieron al jefe de cabina". A Victoria la maltrataron. Le dijeron que no podía ser posible que una mucama --trabaja en el Sanatorio de Niños de Rosario desde hace 18 años-- tuviera 90 días de vacaciones. Un claro signo de discriminación de clase social. Sólo me permitieron quedarme con lo que tenía puesto por casi dos días. Me dejaron el dinero y la Biblia. Tuve que tomar agua del baño y no comí nada. Además me tuve que limpiar y secar la única ropa interior que tenía, en el mismo baño. Y eso que María Cecilia había sido invitada por el profesor Julio Aróstegui, de la Universidad Complutense de Madrid, y que el ministerio de Educación de la Argentina le había dado una beca.
Pero no fue lo peor para María Cecilia: perdió un embarazo. Y hay más casos.
A la contadora y docente de la Universidad Nacional de Salta, Gilda Di Fonzo, la deportaron junto con una niña de 9 años. Di Fonzo iba a hacer una beca y la nena, a visitar a su madre que vive en España desde hace 4 años. La nena vio a la mamá, pero jamás se tocaron, ni se besaron, ni nada: un vidrio las separó todo el tiempo. La abogada que le designaron a Di Fonzo le dijo: "tienes todo en regla, pero la deportación ya está ordenada". Pero la doctora dejó en claro los tantos: "no existe sospecha fundada al constatar como documento acreditativo el billete de ida y vuelta. la única sospecha es ser argentino" Por lo que la actitud de los miembros del puesto fronterizo es discrecional, arbitraria y contraria a derecho".
El canciller Héctor Timerman dijo que "no cree justo" aplicar una política de reciprocidad a los españoles que quieran ingresar al país.
--Estoy confiado en que imperen los lazos de afecto entre nuestros pueblos y terminar con las injustas deportaciones --dijo.