SIGUIENDO CON LOS ESCRITOS DE ÁNGEL...

SIGUIENDO CON LOS ESCRITOS DE ÁNGEL

14.7.14 EN CM Antes de los embalses del Porma y del Esla en cualquier parte de estos dos ríos encontrabas barbos, escallos y bogas. Ahora no es así, solo quedan las truchas (y pocas) con permiso de lucios y eso pajarracos que se lanzan en picado cuando ven una trucha y la agarran los "jodios" de ellos y a ser posible la más grande del lugar. Decir que el barbo es de aguas templadas, no frías, aunque también remontan la corriente y suben hasta la montaña, así como las bogas. Como el agua está fría por culpa de los embalses, tanto los barbos, como bogas y escallos han huido río abajo y por la zona de la ribera de los ríos no queda uno. Cierto que los peces es un buen cebo para los cangrejos.
Yo también cuando iba a pescar cangrejos pescaba peces y los ponía de cebo, pero la rana era la preferida de los cangrejos.

¡Ah!, los cangrejos. No ha quedado ni el apuntador para muestra y señal. me refiero al nuestro, al de siempre... ¡Al nacional! En agosto de 1977 empezaron a morir. Metías las manos en una cueva y los sacabas muertos. Nos preguntábamos, ¿qué pasa que los cangrejos salen muertos? Pocos meses después anunciaban que una peste acababó con ellos. Había cangrejos por todas partes: presas, regueros, ríos, enbalses... además eran unos carroñeros que limpiaban las aguas.

Tienes razón, con los cangrejos se alimentaba una familia, unas veces se ponían tal como estaban, con sal y a cocer, otras veces con arroz, y muchas con alguna salsa de tomates, pimientos y cebolla. En mi casa todos los días había cangrejos. Yo los vendía y también los peces. Las truchas estaban a 20 pesetas el kilo. Los peces entre 3 y 5 pesetas.

14.7.14 EN CM Mi relato de la trucha lo dejo para el final. Cierto que la trucha de embalses no es igual de sabor que la del río, aunque un embalse se llene con un río o más, o con deshielo de las nieves, o lluvias intensas. Como quiera que tengo tiempo voy a hablar de las bogas y de los escallos. Los escallos picaban con cualquier cosa, cazabas una mosca común la ponías de cebo y ¡Hala!, pez que dios te crió al fardel. Porque en mis tiempos comprar una truchera era imposible, no había dinero en casa para estas cosa, así que mi tía me hacia un fardel y allí metía las piezas capturadas.

Estos dos peces tienen poco recorrido para ejercitar un escrito. Su carne no es buena. Abundaban mucho en los ríos, al menos en mi pueblo río arriba y río abajo. También son peces de aguas templadas, no frías de embalses. Yo llamaba a estos peces: "peces bailarines", estaban todo el tiempo para arriba, para abajo, nunca estaban quietos. A los escallos les tirabas un trozo de pan al agua y parecía un partido de fútbol, se reunían un buen número de ellos y queriendo comer el pan lo empujaban con la cabeza y con frecuencia echaban el pan fuera del agua. Yo me divertía viéndolo, además aprovechaba y tiraba el anzuelo con cebo dentro del "rebaño" y siempre pescaba muchos, aunque estos peces comían de todo y había muchos. Poco más que decir de estos dos peces de agua dulce.

14.7.14 EN CM Complementaré algo más de los cangrejos. Se pescaba mucho a mano, pero estaba prohibido, sin embargo la G. Civil era muy condescendiente, nos veía pescar a mano y no nos decían nada. Claro que, también, éramos unos chavales y no nos decían nada. Yo como tenía mucho respeto -no miedo-, por las culebras, no me gustaba meter la mano dentro de una piedra, más de una vez saqué alguna culebra, entonces, ¿qué hacía? Pues cogía un buen palo y picaba la piedra por debajo, salían todos los que hubiera en esa piedra, después los cogía. otras veces, movía un tronco de chopo con fuerza y el agua se revolvía, a los pocos segundos se aclaraba y por allí andaban los cangrejos fuera del chopo, uno por uno los iba atrapando, de tal suerte que, en pocos minutos llevaba todos los días para casa unas cuatro docenas, y hala, a cocerlos tomando una cervecita o un vaso de vino, era el aperitivo. y así un día otro también. Peces y cangrejos. ¡Ah!, cuando quería coger más, tiraba uno o más peces muertos y abiertos al agua, de repente salían los cangrejos a comer el pez y yo cogía los cangrejos. Te hablo de hace: 50, 60 y 70 años atrás. Ahora no, no hay cangrejos, ni peces, excepto truchas.

15.7.14 CM - Y POR FIN: " LA TRUCHA". ¡Majestuosa, desafiante, dominante, altiva, hermosa, diferente...! Es la obra perfecta de la creación después del hombre. " LA REINA DEL RÍO" No existe nada comparable dentro del reino animal acuático, tanto de agua dulce como de agua salada. Es la más hermosa de todos y de todas. De la familia de los salmónidos, pero mucho más guapa que los propios salmones; ni punto de comparación. La trucha, nuestra trucha autóctona, la leonesa, no admite paliativos negativos, es la mejor de todos los ríos españoles por su calidad y por su abundancia (hoy es discutible). No todas las truchas de los distintos ríos leoneses (tenemos muchos) son iguales. Las truchas del Porma, Esla y Órbigo son para quitarse el sombrero ante ellas, no quiere decir que no haya otras truchas espectaculares en los demás ríos. Esbelta, fina, escurridiza entre las manos, ¿agresiva? Da esa sensación, pero para el hombre no lo es, y a pesar de que tiene unos dientes muy afilados, no muerde; es posible que al sacar alguna fuera del agua y al quitar el anzuelo, la trucha se bambolea y te puedes hacer algo de daño con sus dientes, pero es inofensiva. No así para otros peces, en este sentido persigue a los más pequeños para comérselos. Nada muy rápida cuando se la hostiga, pero cuando se recrea nadando es todo un hermoso conjunto bien organizado. El movimiento de su cola parece que está bailando un vals. Esta perfecta armonía de su cuerpo es vista cuando los ríos llevan poca agua y nadan a flor del agua, posiblemente buscando el agua más oxigenada. Gusta estar en aguas limpias, frescas, claras, transparentes y bien oxigenadas. Su carne es asalmonada, de todas formas si usted pesca una trucha de unos 100 gramos, no tiene su carne del color salmón, pero si la captura es de unos 300 gramos, si que lo es. ¿Por qué? Aquí sí que no sé qué contestar. En
cierta ocasión alguien dijo que la trucha adquiría ese color salmón porque comía " rancajes" (no sé como se llaman en lenguaje técnico, en mi pueblo los llamamos así) si usted levanta una gran piedra en la corriente, ve pegada en ella estos alimentos para peces, no creo que el color salmón sea por esta causa, de ser así, las truchas más pequeñas también tendrían el color salmón, pero no es así. (Continuará)