Dedicatoria del Ensayo: ESPAÑA ES DIFERENTE
A España, siempre a España
La única salida para el pueblo español es detener definitivamente esta decadencia política nacional que se inició el 2 de mayo del 1808 tras la invasión francesa que provoco el estallido social en Madrid y tras la victoria española en 1814 quedo inoculado en parte de la sociedad el virus del liberalismo que nos trajo todo tipo de desgracias (la perdida de la otra España en referencia a la América hispana y lo peor la división de los españoles en dos bandos irreconciliables que llevan más de dos siglos luchando entre sí, unos contra otros en una guerra interminable, apartando a los españoles del destino universal que Dios nos había confiado, llevándonos esta etapa decadente a poner en peligro la existencia de la propia España).
Estoy hablando de una revolución o cambio de timón que nos conduzca a un régimen de Democracia Nacional que siente las bases de una nación de ciudadanos libres e iguales y destierre la perpetuación de privilegios y prebendas.
Estamos necesitados de un cambio profundo que conduzca a una democracia real, con estricta separación de poderes, en la que exista una justicia independiente. Hablo de una revolución nacional que devuelva a todos los españoles el orgullo de serlo con el establecimiento de un nuevo régimen que priorice el bienestar de los españoles como primer objetivo de la acción política, de la gestión pública y que suponga un cambio social profundo, de una intervención quirúrgica de urgencia que implante en España una verdadera democracia nacional con la presencia del pueblo español, sin partidos políticos causa de esa guerra interminable mencionada anteriormente, libre del internacionalismo ideológico extranjero, basado en nuestras propias leyes históricas que emanaron del propio pueblo y que no quede el más mínimo rastro de la actual partidocracia corrupta y criminal.
¡Todo por España! ¡España, es lo que importa sea monarquía o república!
Españoles uníos y apartad vuestras diferencias y hago un llamamiento a las conciencias de los que se sienten españoles con identidad nacional sean monárquicos, republicanos, liberales, socialistas, comunistas, anarquistas, tibios nacionalistas, todos unidos por la existencia de España, Patria común de los españoles.
A España, siempre a España
La única salida para el pueblo español es detener definitivamente esta decadencia política nacional que se inició el 2 de mayo del 1808 tras la invasión francesa que provoco el estallido social en Madrid y tras la victoria española en 1814 quedo inoculado en parte de la sociedad el virus del liberalismo que nos trajo todo tipo de desgracias (la perdida de la otra España en referencia a la América hispana y lo peor la división de los españoles en dos bandos irreconciliables que llevan más de dos siglos luchando entre sí, unos contra otros en una guerra interminable, apartando a los españoles del destino universal que Dios nos había confiado, llevándonos esta etapa decadente a poner en peligro la existencia de la propia España).
Estoy hablando de una revolución o cambio de timón que nos conduzca a un régimen de Democracia Nacional que siente las bases de una nación de ciudadanos libres e iguales y destierre la perpetuación de privilegios y prebendas.
Estamos necesitados de un cambio profundo que conduzca a una democracia real, con estricta separación de poderes, en la que exista una justicia independiente. Hablo de una revolución nacional que devuelva a todos los españoles el orgullo de serlo con el establecimiento de un nuevo régimen que priorice el bienestar de los españoles como primer objetivo de la acción política, de la gestión pública y que suponga un cambio social profundo, de una intervención quirúrgica de urgencia que implante en España una verdadera democracia nacional con la presencia del pueblo español, sin partidos políticos causa de esa guerra interminable mencionada anteriormente, libre del internacionalismo ideológico extranjero, basado en nuestras propias leyes históricas que emanaron del propio pueblo y que no quede el más mínimo rastro de la actual partidocracia corrupta y criminal.
¡Todo por España! ¡España, es lo que importa sea monarquía o república!
Españoles uníos y apartad vuestras diferencias y hago un llamamiento a las conciencias de los que se sienten españoles con identidad nacional sean monárquicos, republicanos, liberales, socialistas, comunistas, anarquistas, tibios nacionalistas, todos unidos por la existencia de España, Patria común de los españoles.