Mensajes de Corrupción enviados por Don Vela:

ME OLVIDABA.
¿Dónde hay más corruptos? Donde hay más poder. ¿Cómo se arregla? Desde la escuela, empezando por los padres.
LOS CAMBIOS NO SE ANUNCIAN.
Siendo niño, en Vitoria donde resido, podía leerse un rótulo colocado en algunos edificios: "Prohibido hacer aguas mayores o menores bajo la multa de cinco pesetas". De noche, un sereno se acercó a un ciudadano que meaba en medio de una plaza: "Aquí no se puede mear". " ¿Cómo que no se puede? ¿Que estoy haciendo yo?" El agente descubrió que el infractor era un concejal; y se apartó: "Usted perdone". Y en su fuero interno pensó: "En lo que a mí se refiere, en lo sucesivo, como si quieren mear en la plaza las monjas de clausura".
Ya no existen esos letreros. Se ha corregido la mala costumbre, salvo en ocasiones festivas a nada que se descuiden. El cambio no se produjo por la vía de las prohibiciones. La educación cívico higiénica empezó en la escuela: fue lenta, como toda evolución razonada. Se funciona mejor, no por prohibición sino por convicción.
Las aspiraciones de cambio -a mejor- es propio de todos los países y naciones del globo terráqueo. Y al olfato de algo que se intuye, los políticos - profetas de nuestra época - saltan a la palestra a demostrarnos su capacidad para promover el milagro; para ellos el cambio prometido ha de ser prodigioso, algo así como volver a una nueva especie de paraíso terrenal. Estos neo profetas, como está demostrado, confunden el cambio que anuncian con la palenginesia.
De una situación mala puede uno deslizarse a otra a peor sin darse cuenta. Cuando estás hundido en la miseria se impone la realidad: en el, plano material, salir adelante es posible pero -salvo un golpe de fortuna- sólo a fuerza de sacrificios y disciplina. Cumpliendo unos objetivos con rigor resurgen la inmensa mayoría de los mortales. En estos casos los políticos ayudan, siempre y cuando consigan que todos arrimen el hombro, algo poco común por muchas razones: una cosa es prometer y otra dar trigo.
El cambio real de los países, viene cuando los seres humanos, uno tras otro, evolucionan positivamente. Y esto ¿qué es? Algo que sucede si los pueblos crecen en valores morales, en conocimientos, en buenas costumbres. Antes del cambio lo importante es la evolución de cada persona, y eso tiene mucho que ver con la escuela. Pero en España se enseña poco y, en cambio, se adoctrina mucho. Todo porque la escuela está en poder de los políticos y no de los padres. En España se ignora de hecho el elegir con libertad el modelo de enseñanza que quieres para los tuyos.
Por eso cuesta creer en los cambios anunciados por los políticos sin un razonamiento bien explicado. La evolución no la dictan las leyes tanto como las costumbres. Y el cambio de costumbres no se produce de un día para otro. ... (ver texto completo)
La corrupción no va por barrios, ni por partidos, es un mal generalizado y,
por tanto allí donde hay poder, y/o dinero, los corruptos se encuentran con el clima favorable para hacer de las suyas.

En una democracia como la española en la que se han integrado polìticos, que creen que la pólvora del contribuyente viene del cielo, como el maná, cuando llegan al poder lo primero que piensan es en no perderlo. No importa el dinero, y dispuestos dar felicidad a los sufridos votantes, como las arcas ... (ver texto completo)