A VER MANUEL, mira, el problema ha venido porque Juán...

A LA PATRIA de José de Espronceda
¡CUÁN SOLITARIA LA NACIÓN
QUE UN DIA POBLARA INMENSA GENTE!
¡LA NACIÓN CUYO IMPERIO
SE EXTENDÍA DEL OCASO AL ORIENTE!
¿QUIEN CALMARA ¡OH ESPAÑA!
TUS PESARES?
¿QUIEN SECARÁ TU LLANTO AHORA?
Este es el de Espronceda puede que el otro fuese inspirado en este
pero son diferentes.
manuel

A VER MANUEL, mira, el problema ha venido porque Juán 217, manda un poema de un aficionado de FACEBOOK, que basándose en la ODA AL DOS DE MAYO de Bernardo López García (siglo XIX) confecciona otro poema en el 2017, imitando al del Bernardo López García, motivado por el conflicto de Cataluña, el process, en Octubre de 2017 O SEA CASI DOS SIGLOS DESPUÉS.

Juan 217 encuentra ese poema en internet, lo envía y dice que es de Espronceda, ya salió de su error y el mismo ha borrado el poema y algunos mensajes para evitar confundir a la gente. Y es que a veces en Internet, también trabajan los desinformadores que no sé si adrede o por ignorancia, hacen confundir a la gente, que de buena fe, creen lo que están leyendo.

El que tú envías si que es de Espronceda y el de Bernardo López García, es el siguiente (pongo solo un trozo, ya que es larguísimo).

ODA AL DOS DE MAYO

Oigo, patria, tu aflicción,
y escucho el triste concierto
que forman tocando a muerto,
la campana y el cañón;
sobre tu invicto pendón
miro flotantes crespones,
y oigo alzarse a otras regiones
en estrofas funerarias,
de la iglesia las plegarias,
y del arte las canciones.

Lloras, porque te insultaron
los que su amor te ofrecieron...
¡a ti, a quien siempre temieron
porque tu gloria admiraron:
a ti, por quien se inclinaron
los mundos de zona a zona;
a ti, soberbia matrona
que libre de extraño yugo,
no has tenido más verdugo
que el peso de tu corona...!

Do quiera la mente mía
sus alas rápidas lleva,
allí un sepulcro se eleva
cantando tu valentía;
desde la cumbre bravía
que el sol indio tornasola,
hasta el África, que inmola
sus hijos en torpe guerra,
¡no hay un puñado de tierra
sin una tumba española!

Tembló el orbe a tus legiones,
y de la espantada esfera
sujetaron la carrera
las garras de tus leones.
Nadie humilló tus pendones
ni te arrancó la victoria;
pues de tu gigante gloria
no cabe el rayo fecundo,
ni en los ámbitos del mundo,
ni en el libro de la historia.
Siempre en lucha desigual
cantan tu invicta arrogancia,
Sagunto, Cádiz, Numancia,
Zaragoza y San Marcial.
no arraigan extraños fueros;
En tu suelo virginal
porque, indómitos y fieros,
saben hacer sus vasallos
frenos para sus caballos
con los cetros extranjeros.

Y aún hubo en la tierra un hombre
que osó profanar tu manto.
¡Espacio falta a mi canto
para maldecir su nombre!
Sin que el recuerdo me asombre,
con ansia abriré la historia;
¡presta luz a mi memoria!
y el mundo y la patria, a coro,
oirán el himno sonoro
de tus recuerdos de gloria.

Aquel genio de ambición
que, en su delirio profundo,
cantando guerra, hizo al mundo
sepulcro de su nación,
hirió al ibero león
ansiando a España regir;
y no llegó a percibir,
ebrio de orgullo y poder,
que no puede esclavo ser,
pueblo que sabe morir.
¡Guerra! clamó ante el altar
el sacerdote con ira;
¡guerra! repitió la lira
con indómito cantar:
¡guerra! gritó al despertar
el pueblo que al mundo aterra;
y cuando en hispana tierra
pasos extraños se oyeron,
hasta las tumbas se abrieron
gritando: ¡Venganza y guerra!