Rosell no pierde la esperanza. "Qué equivocado estaba Pedro Sánchez si creía que iba a poder vivir peligrosamente toda la legislatura", dice el editorial. "La renovación al frente del principal partido de la oposición, el agravamiento de la crisis social y económica que nos aqueja y, sobre todo, la implosión del Gobierno en directo estas últimas semanas, han dado el vuelco definitivo a una situación que ya no resiste más". Confundir los deseos con la realidad puede llevar a la frustración. "Al punto al que se ha llegado, todo lo que sea alargar una prórroga tan agónica causará un profundo daño a España". A Sánchez, España le importa una higa. "El Gobierno sanchista ha entrado en una fase de autodestrucción", dice con impotencia. Sólo Sánchez puede convocar elecciones, Rosell. Eso es lo que hay y más vale que te vayas haciendo a la idea.