LUIS DEL VAL.

La valentía de los cobardes.

Lo conveniente es pasar la frontera por carretera o bien una parada ligera, en la que el Cobarde Prófugo podría ir escondido en el maletero.
JOSÉ F. PELÁEZ.

Padre.

La sociedad en su conjunto ha ganado la batalla de la custodia compartida a la izquierda y a su oscuridad cerril y perversa.
JUAN MANUEL DE PRADA.

Amnistía y reconciliación.

Lo que la amnistía hace, al borrar un crimen, es a la postre glorificarlo, haciendo imposible la reconciliación.
DIEGO S. GARROCHO.

Félix Bolaños, el hermeneuta.

Es preferible la amable mentira si viene de los nuestros a una incómoda verdad.
CHAPU APAOLAZA.

Ministro de dos tortas.

Si en la cultura anglosajona el chulo ha pervivido con cierto prestigio, aquí siempre se le consideró un imbécil.
IGNACIO CAMACHO.

La persiana veneciana.

Cualquier dictamen sobre la amnistía queda invalidado si obvia su índole de tarifa política en una transacción ilegítima.
PEDRO GARCÍA CUARTANGO.

Entre Escila y Caribdis.

El presidente está atrapado por fuerzas que no puede controlar y por intereses contrapuestos que tiran de él en direcciones contrarias.
JON JUARISTI.

Sapopeyas.

Uno comprende que el Gobierno se sienta presionado por sus miles de asesores, que pueden quedarse en el paro cualquier día.
JOSÉ F. PELÁEZ.

Usted puede ser Torquemada.

No sé en qué momento la izquierda ha perdido la alegría, el optimismo, la creatividad y el sentido vital del disfrute.
IGNACIO CAMACHO.

La endemia nacionalista.

El argumentario oficialista de la 'pacificación' se cae a pedazos por falta de colaboración de los presuntos pacificados.
JUAN MANUEL DE PRADA.

La yedra y la encina.

Cuando Gambetta decretó la amnistía para los revolucionarios de la Comuna, los amnistiados volvieron como víctimas que clamaban venganza.
Editorial:

El fiscal general cruza los límites del servilismo a Moncloa.

EL MUNDO.
IGNACIO MARCO-GARDOQUI.

Vaya lío.

El hecho de que todo haya partido de los Comunes, que son parte de Sumar, el socio imprescindible del Gobierno central, añade una simpática nota de color al panorama.
ROSA BELMONTE.

Tú a mí no me hundes.

Te viene un novio con un Maserati y dices que ahí no te subes, a no ser que tu novio sea un futbolista de cejas depiladas.
IGNACIO RUIZ-QUINTANO.

Primavera en la charca.

Porque nunca ha habido separación de poderes es posible esa amnistía.