Muy cierto que os vengo de leer. Muy cierto que leo estáis los creyentes en posesión de algo que dejé de lado en mi niñez porque este AALGO no dio respuesta a mis llamadas.
Iberia lo dice: luego regreso a lo dicho: Yo jamás e visto Moscú (por ejemplo) pero si estoy seguro que existe, como millones de cosas que aun no conozco.
Lo que aquí leo, en los pocos días que frecuenté la escuela, se me hablaba de poco mas... Y de algún río, unos reyes muy católicos y rezos: también en casa EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA que por cierto llegaba escaso. Hasta los catorce años. me lo procuraba la tierra que ya cultivaba de mis brazos pequeños. Luego lo busqué, entre gentes que rezaban, y me pagaban con un misero salario y con migajas. Ya no me volvía a acordar de ese dios que me hablaban, mis padres en su creencia, y otros tal vez con menos, quero que si que tenían su vientre colmado.
Me paseé calles, y sigo en ellas, con creyentes y no creyentes: los hay malvados en los unos y los otros, y excelentes personas también, que sirven al prójimo rezando o no rezando.
Sigo presenciando lo que sucede en calles y rincones cara al mundo y me duelen silencios duros y puñaladas atroces del hambre... y si que me preguntrçto a veces donde está Dios.
Estoy pensando, por la respuesta que doy a vuestyras apreciaciones. que este tema bien merece un poema. Por eso sin dios puesto que no me escuchó de niño ni algunas veces que de él me acordé Creo que me voy a decir que si yo fuera ÉL (Dios) no hubiera hecho un mundo tan perverso, injusto, ni tan lleno de lágrímas. Me paro aquí ya que vosotros (que no Dios) me habeéis inspirado, en que en un poema, tal vez nobre a sonrisas apagadas, por tanta injusticia.
Pasad u feliz fin de semana: no lo digo por decir. Yo me lando a las calles en estos momentos y seguro seguro que encuentro a quines se burlan de quines rebuscan en contenedores, gentes que duermen sobre cartones, y hasta los miles de hammbrientos que se traga el mar.
Mis saludos.
Iberia lo dice: luego regreso a lo dicho: Yo jamás e visto Moscú (por ejemplo) pero si estoy seguro que existe, como millones de cosas que aun no conozco.
Lo que aquí leo, en los pocos días que frecuenté la escuela, se me hablaba de poco mas... Y de algún río, unos reyes muy católicos y rezos: también en casa EL PAN NUESTRO DE CADA DÍA que por cierto llegaba escaso. Hasta los catorce años. me lo procuraba la tierra que ya cultivaba de mis brazos pequeños. Luego lo busqué, entre gentes que rezaban, y me pagaban con un misero salario y con migajas. Ya no me volvía a acordar de ese dios que me hablaban, mis padres en su creencia, y otros tal vez con menos, quero que si que tenían su vientre colmado.
Me paseé calles, y sigo en ellas, con creyentes y no creyentes: los hay malvados en los unos y los otros, y excelentes personas también, que sirven al prójimo rezando o no rezando.
Sigo presenciando lo que sucede en calles y rincones cara al mundo y me duelen silencios duros y puñaladas atroces del hambre... y si que me preguntrçto a veces donde está Dios.
Estoy pensando, por la respuesta que doy a vuestyras apreciaciones. que este tema bien merece un poema. Por eso sin dios puesto que no me escuchó de niño ni algunas veces que de él me acordé Creo que me voy a decir que si yo fuera ÉL (Dios) no hubiera hecho un mundo tan perverso, injusto, ni tan lleno de lágrímas. Me paro aquí ya que vosotros (que no Dios) me habeéis inspirado, en que en un poema, tal vez nobre a sonrisas apagadas, por tanta injusticia.
Pasad u feliz fin de semana: no lo digo por decir. Yo me lando a las calles en estos momentos y seguro seguro que encuentro a quines se burlan de quines rebuscan en contenedores, gentes que duermen sobre cartones, y hasta los miles de hammbrientos que se traga el mar.
Mis saludos.
Gracias Juan, hombres como tu hacen mucha falta en el mundo, al leerte me he emocionado, tienes una sensibilidad, especial como buen poeta.
Esto no se si gustara a los que hicieron la encuesta que puso Triana en el enuciado de internet.
Esto te lo diga como mujer que se siente orgullosa de serlo, y tambien de leer cosas tan bellas escritas por UN HOMBRE, GRACIAS AMIGO "de internet."
Esto no se si gustara a los que hicieron la encuesta que puso Triana en el enuciado de internet.
Esto te lo diga como mujer que se siente orgullosa de serlo, y tambien de leer cosas tan bellas escritas por UN HOMBRE, GRACIAS AMIGO "de internet."
Yo te respondería como nacido antes DE, y desde lo vivido, cuando Patría, Dios y sin pan.. O si muy escaso.
Yo te respondería desde, desde la mesa que bendecía mi padre; elcual según mi madre traçes años de horrores le habían hecho huraño, silencioso y como cabreado. Yo te hablaría de como vestido de guerrero, cuando yo tenia unso cuatro años me mojó la caray me pincho çó de su barba, en una escapada, que según mi abuela hizo, de mas allá de donde ponía el Sol...
Yo te hablaría hoy de del Dios de los pobres y el de los ricos, de si desgastar baldosas, y darse golpes de pecho como mostró hace algún tiempo la televisión del expresidente de la patronal... no es una bofetada para dios, y no se está crucificando a Cristo todos los días.
Yo te diría que estoy en la línea de gitano al cual conocí discutiendo, pero que al final lo conocí virtualmente, y me convencí que pese a no ser creyente es un buen hombre.
Bueno: Pienso que tal vez si crea que cristo existió y lo mataron.... que estaba con los pobres, Y que no todos los que rezan lo están. Es bien palpable, que pese a estar en el siglo que estamos. Dios no está para todos.
Y bueno, pienso que lo voy a decir a mi manera, que es lo que creo, y que dios callado palpo todos los días... al pie de calle.
LA CALLE:
La calle esta llena de voluntades heladas, de silencios duros y de puñaladas.
La calle no es ese que mucho de niño soñaron
en escasez de nanas: la habitan hombres apaleados.
La habitan hombres con sonrisas apagadas y niños con prestados juguetes.
la pueblan hombres calzando zapatos de suelas desgastadas
porque botas poderosas, pisotean madrugadas.
Las calles que yo piso y palpo desd mis ojos asombrados y dolidos
están llenas de hombres que se desangran sin esperanza.
Ciertamente ya apenas si se fabrican catedrales, ni palacios
pero si que caen a chorros en chabolas y muy cerca de lujosas moradas
lagrimas de hambre de niños con sus pçioes descalzos chapoteando en el barro.
Su Dios se ha hecho silencio
Su dios no se ocupa ni de él ni de los muchos desahuciados.
El dios con el que soñaron no castiga al banquero de turno...
y se inventa salarios de miseria, ni contenedores
donde rebuscar lo que a otros les sobra
Es otoño y muy pronto los árboles se desnudaran de sus hojas
se aproxima el invierto derçtro de otro interminable para muchos
y,,, que a nadie extrañe el grito de! Ladrones, usureros!
El señor encovatado pasa callando, entra en su refugio, bien blidadso
y seguro, seguro que se ré a carcajadas, para luego: discutir con la gran camada, cuanto se aunetarán la prima este año...
¿Las calles? Las calles a estos no les importa nada,
Ni que nazcan cada día mas pobres, ni que griten las gargantas.
si que los gobiernos se muestre obedientes y su misioos a sus ordenes.
Seguro que muchos de ellos rezan...
Mientras una hilera de hombres se despliga a contenedores, se cobija bajo puentes o reposa entre cartones.
Sigue siendo otoño: mi jardín... muy sudado ya luce hojas amarillentas...
Así desde siglos un invierno mas, en el infinito de muchos que ves como se estrellan sin esperanza y hasta caen de bruces contra el suelo.
Se está nublando, el día se torna frío: ¿quien se cree que todos los que rezan
están pidiendo a dios por los muchos sin abrigo?
Mi estimada amiga: si aún me quedan esperanzas de que algunos nos llamemos hermanos... Soñar no me cuesta nada. Abrazos.
Yo te respondería desde, desde la mesa que bendecía mi padre; elcual según mi madre traçes años de horrores le habían hecho huraño, silencioso y como cabreado. Yo te hablaría de como vestido de guerrero, cuando yo tenia unso cuatro años me mojó la caray me pincho çó de su barba, en una escapada, que según mi abuela hizo, de mas allá de donde ponía el Sol...
Yo te hablaría hoy de del Dios de los pobres y el de los ricos, de si desgastar baldosas, y darse golpes de pecho como mostró hace algún tiempo la televisión del expresidente de la patronal... no es una bofetada para dios, y no se está crucificando a Cristo todos los días.
Yo te diría que estoy en la línea de gitano al cual conocí discutiendo, pero que al final lo conocí virtualmente, y me convencí que pese a no ser creyente es un buen hombre.
Bueno: Pienso que tal vez si crea que cristo existió y lo mataron.... que estaba con los pobres, Y que no todos los que rezan lo están. Es bien palpable, que pese a estar en el siglo que estamos. Dios no está para todos.
Y bueno, pienso que lo voy a decir a mi manera, que es lo que creo, y que dios callado palpo todos los días... al pie de calle.
LA CALLE:
La calle esta llena de voluntades heladas, de silencios duros y de puñaladas.
La calle no es ese que mucho de niño soñaron
en escasez de nanas: la habitan hombres apaleados.
La habitan hombres con sonrisas apagadas y niños con prestados juguetes.
la pueblan hombres calzando zapatos de suelas desgastadas
porque botas poderosas, pisotean madrugadas.
Las calles que yo piso y palpo desd mis ojos asombrados y dolidos
están llenas de hombres que se desangran sin esperanza.
Ciertamente ya apenas si se fabrican catedrales, ni palacios
pero si que caen a chorros en chabolas y muy cerca de lujosas moradas
lagrimas de hambre de niños con sus pçioes descalzos chapoteando en el barro.
Su Dios se ha hecho silencio
Su dios no se ocupa ni de él ni de los muchos desahuciados.
El dios con el que soñaron no castiga al banquero de turno...
y se inventa salarios de miseria, ni contenedores
donde rebuscar lo que a otros les sobra
Es otoño y muy pronto los árboles se desnudaran de sus hojas
se aproxima el invierto derçtro de otro interminable para muchos
y,,, que a nadie extrañe el grito de! Ladrones, usureros!
El señor encovatado pasa callando, entra en su refugio, bien blidadso
y seguro, seguro que se ré a carcajadas, para luego: discutir con la gran camada, cuanto se aunetarán la prima este año...
¿Las calles? Las calles a estos no les importa nada,
Ni que nazcan cada día mas pobres, ni que griten las gargantas.
si que los gobiernos se muestre obedientes y su misioos a sus ordenes.
Seguro que muchos de ellos rezan...
Mientras una hilera de hombres se despliga a contenedores, se cobija bajo puentes o reposa entre cartones.
Sigue siendo otoño: mi jardín... muy sudado ya luce hojas amarillentas...
Así desde siglos un invierno mas, en el infinito de muchos que ves como se estrellan sin esperanza y hasta caen de bruces contra el suelo.
Se está nublando, el día se torna frío: ¿quien se cree que todos los que rezan
están pidiendo a dios por los muchos sin abrigo?
Mi estimada amiga: si aún me quedan esperanzas de que algunos nos llamemos hermanos... Soñar no me cuesta nada. Abrazos.
Juan, ya sebes que te leo siempre, y siempre me emocionas, hemos vivido cosas muy duras, pero tu corazón no se ha endurecido, todo lo contrario estas siempre del lado del mas débil, ¡cuanta miseria hemos vivido!.
Lo que dices de tu padre yo lo vivi con mi querida abuela, creo que nunca la vi sonrreír, en noche buena tocaba la pandereta y cataba las jotas con mucho salero
pero siempre muy seria.
¡Como la recuerdo! nunca la vi preocuparse de ella misma, era muy "rezungona" como se dice en mi pueblo, y como niños que eramos no la hacíamos mucho caso estoy segura, yo he aprendido a quererla de mayor cuando ya no estaba, y me dí cuenta de lo que se sacrifico por sus nitos, y lo que respetaba a su nuera que era mi madre, se quedo viuda y como mi padre era hijo único vivía con nosotros,
Cuanto he agradecído yo esa paguíta no contributíba que dignifico a gentes como ella, que ahora pienso que se sentían en deuda y no sabían como pagárselo, lo hacían sacrificándose demasiado por la familia, hoy esa paga ha venido a solucionar mucho problemas en la familia.
Fue una gran mujer, y a mi me entristece pensar que sus nietos segura que no fuimos lo cariñosos que ella se merecía.
Gracias abuela Manuela.
Un abrazo Juan y otro a Paloma,
Lo que dices de tu padre yo lo vivi con mi querida abuela, creo que nunca la vi sonrreír, en noche buena tocaba la pandereta y cataba las jotas con mucho salero
pero siempre muy seria.
¡Como la recuerdo! nunca la vi preocuparse de ella misma, era muy "rezungona" como se dice en mi pueblo, y como niños que eramos no la hacíamos mucho caso estoy segura, yo he aprendido a quererla de mayor cuando ya no estaba, y me dí cuenta de lo que se sacrifico por sus nitos, y lo que respetaba a su nuera que era mi madre, se quedo viuda y como mi padre era hijo único vivía con nosotros,
Cuanto he agradecído yo esa paguíta no contributíba que dignifico a gentes como ella, que ahora pienso que se sentían en deuda y no sabían como pagárselo, lo hacían sacrificándose demasiado por la familia, hoy esa paga ha venido a solucionar mucho problemas en la familia.
Fue una gran mujer, y a mi me entristece pensar que sus nietos segura que no fuimos lo cariñosos que ella se merecía.
Gracias abuela Manuela.
Un abrazo Juan y otro a Paloma,
Esperaba por aquí mas respuestas, no ha sido así, Por lo que te responderé çcon un corto mensaje puesto que me sispongo a salir. Si que pasaré si puedo después si me queda tiempo, para sa, ludar a Yoli y a algunos mas. Y es que de resultas, hoy e facebook he sido invadido.
Algo de eso decía mi padre (muy creyente por cierto) y con esta palabras: Entre creyentes y no creueyentes, me llevaron para aprender que unos quemaban iglesias y otros bendecían cañones. Entre ambos, me jo... (y lo que sigue) ala vida. Ami me empujaba a lo suyo pero yo ya nacía rebelde, y sufrido pero sacando alegría de debajo de las piedras, como mi sufrida madre, y sostenida, por la sabiduría de mi abuela... que precisamente no sabía leer. QUe cosas: ¿verdad? Y joder...! Mira que pretender que las olvidemos!
Un abrazo a los tuyos
Algo de eso decía mi padre (muy creyente por cierto) y con esta palabras: Entre creyentes y no creueyentes, me llevaron para aprender que unos quemaban iglesias y otros bendecían cañones. Entre ambos, me jo... (y lo que sigue) ala vida. Ami me empujaba a lo suyo pero yo ya nacía rebelde, y sufrido pero sacando alegría de debajo de las piedras, como mi sufrida madre, y sostenida, por la sabiduría de mi abuela... que precisamente no sabía leer. QUe cosas: ¿verdad? Y joder...! Mira que pretender que las olvidemos!
Un abrazo a los tuyos